A pesar de que Ciudad de México (CDMX) es una de las entidades con mayor escolaridad promedio (11.1 años, frente a una media nacional de 9.2 años), también se ubica como la cuarta con más desigualdad en los logros educativos por nivel socioeconómico de los alumnos, a lo que se suman retos en su cobertura para prescolar, estancamiento en la mejora de sus tendencias de aprendizaje, altas tasas de deserción en bachillerato y falta de atención a niños indígenas.

Al presentar el Estudio sobre la situación que guarda la educación y la evaluación en Ciudad de México 2018, el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) advirtió que 77 mil 768 niños de entre 3 y 5 años no asisten a prescolar.

En educación media superior se detectó que CDMX tiene una de las tasas de abandono escolar en bachillerato más altas del país, con 24.4 por ciento de su matrícula.

En el auditorio del INEE, Genaro Rey Meneses, director del organismo autónomo en la capital, señaló que otro de los cinco desafíos incluye a la población escolar indígena, pues al menos 74 mil 933 menores en edad de cursar su educación básica están desatendidos en sus derechos lingüísticos, educativos y culturales, pues sólo mil 825 reciben algún apoyo en sus escuelas.

En entrevista, Sylvia Schmelkes del Valle destacó que un número muy reducido de menores indígenas en edad de cursar la educación básica son atendidos de acuerdo con sus necesidades formativas, por lo que agregó que se deben considerar múltiples desafíos.

La ex presidenta del INEE y actual consejera de su Junta de Gobierno destacó que la principal función del organismo autónomo es proveer este tipo de cifras, de estadísticas para que se puedan tomar mejores decisiones de política pública, labor que consideró debe continuar realizando en la próxima administración.

Nashieli Ramírez Hernández, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, enfatizó la necesidad de atender los múltiples factores que afectan a niños y adolescentes en su escuela, pero también su entorno estudiantil, como la inseguridad.

Reconoció que CDMX enfrenta, entre otros desafíos, los embarazos adolescentes como factores que inciden en la deserción escolar en bachillerato.