El tema de la Casa Blanca fue una transacción estrictamente legal, pero impactó en la credibilidad del gobierno, de la institución presidencial y de la administración federal, lamenta el presidente Enrique Peña Nieto en el promocional difundido desde ayer como parte de la campaña hacia su sexto Informe de gobierno.

En el mismo, el mandatario reivindica, sin embargo, a su gestión como especialmente respetuosa de la libertad de expresión.

Así, al continuar el balan­ce de su sexenio y en particu­lar de hechos de fuerte impacto, el Presidente se refiere en este video al inmueble cuya propiedad se adjudicó su esposa, Angélica Rivera, cuando se dio a conocer en noviembre de 2014.

Dijo que la legalidad de la transacción quedó acreditada con información pública y exhibida sin tener siquiera necesidad ello, pero lo real es que impactó en la credibilidad del gobierno, de la institución presidencial y de la actual administración federal.

Asume: Creo que la manera en que manejamos en su momento la explicación del asunto tampoco fue correcta. Nunca debí permitir que mi esposa diera esa explicación, porque era yo el que tenía la responsabilidad, el cuestionamiento era sobre el Presidente.

Dice haber ofrecido una disculpa pública, no tanto porque se hubiese actuado equivocadamente, sino por cuanto afectó la credibilidad de la institución presidencial y del gobierno.

Para el presidente Peña, esa compra sin duda marca a esta administración sobre todo por la forma en que escaló este asunto en distintos ámbitos.

En seguida, y en el promocional de dos minutos, dice haber encabezado una gestión respetuosa de las instituciones del Estado, de la forma de pensar de cada mexicano y haber gobernado en pluralidad y con respeto a las distintas expresiones políticas, construyendo con ellas, buscando los acuerdos y los consensos para impulsar los cambios que el país necesitaba.

Este gobierno, fue especialmente respetuoso de la libertad de prensa , de la libertad de expresión, asegura.

Los señalamientos y críticas recibidas –dice– muchas veces han servido para enriquecer el quehacer del gobierno. Y reivindica: Lo que no se puede dejar de reconocer es que hemos sido un gobierno democrático, plural, respetuoso de la libertad de expresión como un derecho que consagra nuestra ­Constitución.