Mexicali, BC.

Durante la primera jornada de petición de asilo político de los integrantes del Viacrucis Migrante, 25 centroamericanos ingresaron a territorio de Estados Unidos por la garita internacional de San Ysidro, California, limítrofe con Tijuana. Ocho de ellos eran tres mujeres, cuatro niños y un adulto mayor de origen hondureño, familiares entre sí, que alrededor de las 19 horas del lunes entregaron su solicitud de asilo a un funcionario de migración estadunidense.

Mientras, el fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, dio a conocer que el Departamento de Justicia de ese país presentó cargos criminales contra 11 personas que aseguraron ser miembros de la caravana de migrantes, y entraron sin documentos a territorio estadunidense. Los 11 procesados –ocho hombres y tres mujeres, todos centroamericanos– fueron arrestados por la Patrulla Fronteriza en cuatro puntos distintos, a distancias de entre tres y seis kilómetros del puerto de entrada de San Ysidro.

Cuando disminuye el respeto por el estado de derecho, también lo hace nuestra capacidad de proteger a nuestra gran nación, sus fronteras y sus ciudadanos, dijo Sessions. Según la cadena CNN, serán procesados dos salvadoreños, seis hondureños y tres guatemaltecos, 10 de ellos por un delito menor, mientras que otro, que ya fue deportado en el pasado, enfrenta un cargo criminal.

En cuanto a los ocho centroamericanos que iniciaron trámites, el dirigente de la organización Pueblos Sin Fronteras, Irineo Mújica, dijo que si los dejaron pasar es porque van a permitírselo al resto, porque saben que huyen de la violencia en sus países.

Es un juego, una farsa del gobierno de Donald Trump que está haciendo para que los migrantes y sus abogados se desesperen por no atender sus peticiones de asilo aunque cumplan con la ley vigente, dijo a su vez la abogada Nicole Ramos, integrante de la organización binacional Al Otro Lado, asesora de la caravana.

Es una pena que en 24 horas sólo hayan atendido a ocho personas, cuando tienen las instalaciones para atender a todos, incluso en centros de detención a donde seguramente irán a parar todos, señaló Ramos. Sobre la postura del presidente Donald Trump y del vicepresidente Mike Pence, quienes aseguran que las leyes migratorias de Estados Unidos son las más débiles del mundo, la defensora de deportados y refugiados señaló que ambos políticos no son inteligentes ni abogados, sino racistas, nacionalistas.

Por lo pronto, los migrantes que pretenden comenzar sus trámites, en su mayoría familias con mujeres y niños, permanecieron afuera de la garita de El Chaparral de Tijuana en espera de que se acepten sus solicitudes.

La explanada del paso fronterizo El Chaparral, por donde todos los días miles de personas entran caminando a Estados Unidos, es al momento un campamento del Viacrucis Migrante: niños, mujeres y hombres se instalaron en casas de campaña, a la espera de ser recibidos por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.

(Con información de Mireya Cuéllar, Afp y Dpa)