Hannover, Alemania.

Desde ésta, la capital del estado alemán de Baja Sajonia, el presidente Enrique Peña Nieto anunció haber alcanzado un acuerdo en principio en la renegociación del Tratado de Libre Comercio entre México y la Unión Europea (TLCUEM).

Para Peña Nieto, la modernización de ese acuerdo comercial amplía nuestros mercados y nos consolida como socios prioritarios de uno de los bloques económicos más relevantes del mundo.

Vía su cuenta de Twitter, el mandatario expresó: “He sido informado por el secretario de Economía, @ildefonsogv que el día de hoy [sábado], en Bruselas, llegamos a un acuerdo en principio en la negociación del Tratado de Libre Comercio Unión Europea-México’’.

Por su lado, las secretarías de Relaciones Exteriores y de Economía confirmaron la conclusión exitosa de las negociaciones de un nuevo acuerdo global con la Unión Europea, que incluye aspectos políticos, económicos y de cooperación que permitirán fortalecer el diálogo político, incrementar los flujos comerciales y de inversión, así como elevar la colaboración técnica y científica para beneficio de ambas sociedades.

En un comunicado informaron que el nuevo tratado profundiza los beneficios del comercio entre ambas partes, particularmente en el sector agroalimentario, donde se eliminarán los aranceles a productos mexicanos como jugo de naranja, atún, miel, jarabe de agave, la ovoalbúmina, frutas y vegetales.

Ampliación de comercio de servicios

Adicionalmente, se logró proteger los productos sensibles, como manzanas, duraznos y lácteos. Estas acciones representarán beneficios para los consumidores, a la vez que promoverán la diversificación de exportaciones nacionales, puntualizaron las dos dependencias.

Agregaron que también se amplía el comercio de servicios, al incorporar telecomunicaciones y la entrada temporal de personas y servicios relacionados con la economía digital. De igual manera, señalaron que se refuerzan las disposiciones para la protección de las inversiones y se crea un moderno mecanismo de solución de controversias.

Al igual que en 1997, cuando se concluyó el primer convenio, indicaron que México y la Unión Europea escriben una nueva página en su historia con el acuerdo más avanzado en su tipo, el cual permitirá a los dos desempeñarse como actores globales en beneficio de sus sociedades.

Recordaron que desde un año antes de la entrada en vigor del TLCUEM (1999), el comercio bilateral se ha cuadruplicado. El bloque europeo contribuye con 38 por ciento de la inversión extranjera directa que recibe México, con flujos que rebasan los 184 mil 636 millones de dólares entre 1999 y 2017.

Con la conclusión de este nuevo acuerdo, México y la Unión Europea envían un fuerte mensaje al mundo sobre la importancia de mantener los mercados abiertos, trabajar conjuntamente por la vía multilateral para enfrentar desafíos globales y cooperar en beneficio de las causas de la humanidad, enfatizaron.

Para la administración de Pe­ña Nieto, poner al día el acuerdo comercial con la Unión Europea –suscrito en marzo de 2000 en Lisboa por el entonces presidente Ernesto Zedillo– se había convertido en una prioridad, no sólo para la política de diversificación de mercados, sino como alternativa importante frente al complejo proceso de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Originalmente denominado Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación, fue considerado en su momento como un ejemplo de la globalización y el primero en su tipo en ser firmado por la Unión Europea con un país de América Latina.