El jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera Espinosa, determinó cancelar la construcción de un centro de transferencia de residuos sólidos urbanos en el predio ubicado en avenida 5 de Mayo, número 62, de la colonia Merced Gómez, delegación Álvaro Obregón.

De hecho, la obra tenía más de dos meses suspendida a raíz de las movilizaciones de vecinos que se oponen al proyecto e instalaron en el acceso al predio un campamento para impedir el suministro de materiales para proseguir los trabajos, explicó la presidenta del comité ciudadano de Lomas de Tarango Unidad Habitacional, Cindy López Giles.

Aunado a esto, se presentó un amparo en contra del proyecto desde la Asamblea Legislativa (ALDF), donde el pasado 23 de agosto se aprobó un exhorto, respaldado por PAN, PRD y Morena, dirigido a la Secretaría de Obras y Servicios, para suspender la obra y explorar la ampliación del centro de transferencia que opera debajo del distribuidor vial San Antonio.

Ayer, López Giles y representantes vecinales de varias de las 22 colonias que integraron el Movimiento Ciudadano Corredor Centenario fueron convocados por la Comisión de Gobierno de la ALDF para ser notificados de la decisión del mandatario capitalino de cancelar la obra y destinar el predio a servicios para la comunidad, como una casa de cultura, una unidad deportiva o un centro comunitario.

Posturas coincidentes

El órgano legislativo informó a los vecinos que se realizaron reuniones con la Secretaría de Obras, la Agencia de Gestión Urbana, la Secretaría de Medio Ambiente y la Oficialía Mayor, y el jefe de Gobierno coincidió con la postura de los vecinos de que el proyecto no es viable en ese punto, en particular por los problemas de saturación vial, tanto en la avenida 5 de Mayo como en Centenario.

López Giles señaló que la propuesta que se ha planteado en reuniones vecinales para dar otra utilidad al predio, que anteriormente fue un patio de encierro de la desaparecida Ruta 100, es un espacio cultural y para actividades deportivas, ya que el deportivo Plateros, que es el más próximo a la zona, está a más de tres kilómetros de distancia.

Explicó que las movilizaciones desde el 3 de agosto, entre ellas una marcha que realizaron el día 11 de ese mismo mes y en la que, dijo, participaron alrededor de 2 mil personas, y el campamento que se instaló en la entrada del predio, permitieron que se suspendieran los trabajos.