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19/S: El dolor y la esperanza

Informa que ha repartido cerca de 200 mil litros

El CCCM intensifica acciones para brindar agua a capitalinos
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En la delegación Iztapalapa también se ha distribuido agua a las colonias afectadas por los cortes del servicio. Algunas personas logran llenar algunos tambosFoto Víctor Camacho
 
Periódico La Jornada
Miércoles 4 de octubre de 2017, p. 15

Con la finalidad de atenuar la crisis del agua en las zonas afectadas por los recientes sismos, el Consejo Ciudadano de Ciudad de México (CCCM) envió pipas para los habitantes de las delegaciones Tláhuac y Xochimilco, que son de las más afectadas por esa problemática.

De acuerdo con ese organismo, en esas dos demarcaciones se distribuyeron cerca de 200 mil litros de agua en los días posteriores al 19 de septiembre.

En ambas jurisdicciones ocurrieron casos en los que la gente desesperada por la falta del servicio secuestró pipas o bien perforaron la red hidráulica para tratar de obtener agua.

Frente a tal situación, el Consejo Ciudadano impulsó el envío de 25 pipas que distribuyeron en total 50 mil litros de agua en Tláhuac.

Ahi, explicó el consejo, se hizo el reparto a los moradores de la Unidad Habitacional La Draga, que está sobre avenida La Turba, en la colonia Del Mar –que fue de los puntos con los mayores estragos de toda esta delegación–, con lo que se apoyó a 3 mil familias.

Otro de los puntos en que se recibió a las pipas fue la base del Agrupamiento Zorros, de la Secretaría de Seguridad Pública de Ciudad de México, además de varias calles en donde los afectados llenaban sus botes o cubetas.

Otra de las zonas de reparto fue en Xochimilco, lugar en el que se entregaron durante seis días 120 mil litros de agua.

De igual forma, el Consejo Ciudadano instaló pequeños refugios para damnificados.

Sobre esa misma problemática, las autoridades delegacionales mencionaron que tanto el Sistema de Aguas de la Ciudad de México, como la Comisión Nacional del Agua colaboran para solucionar la falta del servicio.

Por una parte se reparan los tramos fracturados de la red hidráulica primaria, que es la que corresponde atender a esas instancias.

Aunado a ello, se envían cada vez mayor número de pipas a las zonas de Tláhuac y Xochimilco, en donde la crisis del reparto es más aguda.

Para evitar que las pipas sean desviadas por habitantes o gente ajena a la problemática se ha dispuesto a policías para que acompañen a los vehículos.