Sociedad y Justicia
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Siguen vendiéndose porque la gente está desesperada, dice el comisionado Pérez Vega

Rechaza la Cofepris que normas laxas impidan erradicar productos milagro

Medios de información no ayudan a evitar fraude con esos artículos: El Poder del Consumidor

 
Periódico La Jornada
Miércoles 1º de marzo de 2017, p. 36

El hecho de que los productos milagro no hayan podido ser totalmente erradicados no se debe a que las normas sean laxas y se permita seguir vendiéndolos, sino a que la necesidad y deses-peración de mucha gente por curarse de alguna enfermedad la lleva a arriesgarse a comprar supuestos medicamentos que no cumplen con las regulaciones mínimas de salud.

Así lo afirmó Álvaro Pérez Vega, comisionado de operación sanitaria de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), quien indicó que aunque de 2010 a la fecha la Cofepris ha decomisado más de 4.5 millones de artículos milagro, éstos continúan vendiéndose porque la demanda lo permite.

“Para evadir regulaciones, estos productos –clasificados como suplementos alimenticios– afirman que curan y previenen enfermedades. Por la necesidad de curarse muchas personas los eligen, pero no alivian su situación. Incluso pueden complicar los cuadros clínicos”, alertó Pérez Vega en entrevista.

Otro factor que ayuda a la persistencia de este fenómeno es que dichos artículos son de precio accesible y engañan deliberadamente a los consumidores con fotografías que no corresponden con sus efectos. Además usan nombres atractivos, como Nervicólon, Menos kilos, Súper demoledor de grasa y Maximsex.

Todo ello ha permitido a los fabricantes de esos productos alcanzar ventas por 29.6 millones de dólares, equivalentes a 3.3 por ciento del mercado total de suplementos alimenticios.

De cara a ese fenómeno, la Cofepris ha llevado a cabo diversas acciones de vigilancia sanitaria para sacarlos del mercado, entre ellas la suspensión de más de 10 mil páginas de Internet que los ofrecen, el retiro de publicidad engañosa en menos de 24 horas y la imposición de multas por más de 37 millones de pesos en lo que va de la actual administración.

No es que fallen las leyes. Tenemos un marco robusto que permite todas esas acciones, las cuales han dado muchos resultados. El reto es hacer que la demanda baje, para que se reduzca también la oferta. Ya hay menos que hace 4 años, pero sigue existiendo. Por eso tenemos que continuar con nuestras acciones de regulación, enfatizó.

Por su parte, el director de la organización El Poder del Consumidor, Alejandro Calvillo, consideró que la existencia de productos que se anuncian con cualidades totalmente exageradas también obedece a que algunos medios informativos no han sido cuidadosos para evitar la continuación de ese fraude.

Algunos son muy cuidadosos para evadir la regulación y manejan cierto tipo de lenguaje, pero también hay una falta de aplicación de las leyes en los medios, sobre todo en el caso de empresas grandes, que incluso tienen vínculos con televisoras que invirtieron en ellas, denunció el activista.