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La recomposición del imperio

Marchas en Los Ángeles, San Francisco, San José y Oakland

La resistencia comienza hoy, advierten en California
 
Periódico La Jornada
Sábado 21 de enero de 2017, p. 7

San Francisco.

Anoche miles de personas se concentraron en la Plaza de las Naciones Unidas, en las inmediaciones de un Civic Center blindado por la policía para repudiar a Donald Trump como presidente de Estados Unidos. Miles de personas corearon: Sin justicia no hay paz, así como No es mi presidente y La resistencia comienza hoy. Destacaba la gran cantidad de mujeres con letreros desafiantes, como El coño contraataca o Este coño tiene garras, en referencia a las prácticas y dichos misóginos del flamante mandatario estadunidense.

En la costa oeste de Estados Unidos, particularmente el estado de California, existe un generalizado rechazo y un estado de alerta con la llegada al gobierno de Donald Trump. Las principales movilizaciones este viernes se realizaron en las ciudades de Los Ángeles, San Francisco, San José y Oakland. En esta última, donde la reacción policiaca fue más violenta, se reportaron al menos seis personas detenidas esta mañana.

En Los Ángeles, desde las 10 de la mañana hora local, mientras Trump asumía el cargo en Washington (donde son tres horas más tarde), dio inicio una gran marcha convocada por organizaciones binacionales y uniones de barrio a partir de la calles Broadway. Los Ángeles le mostró a todo el mundo que no tenemos miedo, declaró Ron Góchez, de Unión del Barrio, uno de los organizadores de la movilización pacífica.

Del mismo modo, en San Francisco una marcha matinal recorrió la calle Market para repudiar al nuevo gobierno de Estados Unidos, el cual, entre otras cosas, ha prometido expulsar a millones de indocumentados, principalmente de origen mexicano, y realizar importantes recortes a los programas sociales, además de exhibir numerosas muestras de racismo, lo que se ha calificado de discurso de odio, que lo habrían llevado a la victoria electoral. Un día antes, todo el personal docente de City College, en el barrio de la Misión, se concentró bajo el inmenso Calendario Azteca, que ocupa la fachada de la institución demandando respeto a todas las lenguas y todos los orígenes: Educación, no deportación, era su consigna. Similares protestas focalizadas se repitieron hoy en toda el área de la Bahía.

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Manifestantes intentaron bloquear en Washington una entrada a la ceremonia de investidura de TrumpFoto Afp

Este mediodía se tendió una larga cadena humana a lo largo del emblemático puente Golden Gate llamando a la unidad (Bridge together), ante lo que se ve como la inminencia de tiempos aciagos para las libertades civiles, destacadamente los derechos de las minorías sexuales, los migrantes, los musulmanes, los pueblos indígenas (o nativos americanos) y los afroestadunidenses. Miles de personas tomadas de la mano, muchos portando ropas moradas (considerado como el color contra el bulliyng), cubrieron la totalidad de los mil 280 metros del puente, en donde el océano Pacífico entra a la bahía de San Francisco.

En lo que activistas y observadores consideran un día muy triste (según palabras de la legendaria luchadora afroestadunidense Angela Davis), contingentes escolares y de activistas marcharon en distintos puntos de Oakland para manifestar su rechazo al presidente Trump.

La estación ferroviaria de San Francisco fue bloqueda por personas encadenadas a las vías, en el acceso y la salida de la ciudad. De acuerdo con el diario San Francisco Chronicle, trabajadores del llamado Caltrain rompieron las cadenas de los que protestaban para liberar el paso y al menos 11 activistas fueron arrestados por la policía mientras gritaban: Si no hay justicia, no habrá paz. El bloqueo duró tres horas.

Hubo también bloqueos a la oficina central del banco Wells Fargo, así como a las sedes de empresas que cuentan con Donald Trump o miembros de su gabinete entre sus propietarios.

Para el sábado se anuncia una gran marcha de mujeres, que será parte de una movilización nacional contra el presidente más explícitamente sexista y patriarcal del que se tenga memoria en Estados Unidos.