Sociedad y Justicia
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Se desechan alrededor de 125 mil toneladas al año, señala estudio del IPN

Aumentan hasta 78% los residuos electrónicos en el valle de México

Sólo se aprovecha 10 por ciento; el resto se tira a rellenos sanitarios y barrancas, apunta

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Se calcula que con el apagón analógico serán desechados, en diversos lapsos, 5 millones 747 mil 174 televisoresFoto María Meléndrez Parada
 
Periódico La Jornada
Domingo 15 de enero de 2017, p. 26

De 2010 a 2016 aumentó entre 38 y 78 por ciento el desecho de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos en la zona metropolitana del valle de México, donde hoy se tiran unas 125 mil toneladas al año, de acuerdo con un estudio del Instituto Politécnico Nacional (IPN). De ese volumen, 30 por ciento son celulares que se usan en promedio menos de dos años, mientras la vida útil de otros aparatos que se desechan es de unos tres años.

Saúl Hernández Islas, profesor de la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Biotecnología (Upibi), encontró que sólo se aprovechan 10 por ciento de estos residuos y lo demás no tiene adecuado manejo, por lo que la mayoría se tira a rellenos sanitarios y barrancas.

La investigación identificó que más de 95 por ciento de la población está dispuesta a colaborar con el gobierno para llevar a cabo un correcto manejo de estos residuos y que más de 70 por ciento acepta pagar por su tratamiento.

Se calcula que con el apagón analógico serán desechados 5 millones 747 mil 174 televisores durante diversos lapsos. Esto representa un alto riesgo de contaminación, principalmente por el plomo contenido en los cinescopios.

La investigación, en la que también participan el catedrático Fabián Robles Martínez y la egresada Marina Ivette Ruiz Mondragón, se realizó mediante la aplicación de 523 encuestas electrónicas, de 16 preguntas cada una, con la plataforma QuestionPro, dirigida a hogares de la zona metropolitana del valle de México.

Ruiz Mondragón explicó que la distribución y comercialización de aparatos eléctricos y electrónicos (AEE) se ha incrementado en los años recientes y genera grandes volúmenes de residuos que, por los componentes que los integran, desencadenan un problema ambiental y de salud.

Aunque muchos de estos residuos son potencialmente valorizables y representan un mercado emergente, se encuentran presentes otros considerados peligrosos, por lo que necesitan ser atendidos de manera particular para minimizar los riesgos y cumplir con el marco regulatorio vigente en materia de residuos peligrosos, añadió.