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La francesa recibió el Globo de Oro a mejor actriz dramática; ha participado en más de 110 cintas

“Por su autenticidad, audacia y talento sólo Isabelle Huppert podría protagonizar Elle”
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Isabelle Huppert al recibir el premio en la ceremonia realizada en Beverly HillsFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Martes 10 de enero de 2017, p. 9

París.

La francesa Isabelle Huppert, galardonada con un Globo de Oro por su papel en Elle, es una actriz prolífica y camaleónica, que ha participado en más de un centenar de filmes, en Francia y el extranjero.

La artista pelirroja, de 63 años, se llevó el domingo el premio a la mejor actriz dramática por su interpretación en el thriller subversivo del holandés Paul Verhoeven, en el que personifica a una mujer violada que, lejos de hundirse, se lanza en busca de su agresor.

Verhoeven defendió el domingo que sólo Isabelle Huppert podía encarnar ese personaje, debido a su audacia, autenticidad y talento.

No hay muchas cosas que me den miedo en las películas, explicó la actriz, que ya ha recibido varios premios estadunidenses por este papel que le podría dar el mes que viene un Óscar.

Con más de 110 filmes en su haber, Huppert es una de las actrices francesas más prolíficas, capaz de meterse en la piel de una mujer seductora, una pianista retorcida, una falsa ingenua o de una madre superiora demasiado afectuosa.

En 2005, la Mostra de Venecia le entregó el León de Oro por su carrera y en 1996 se llevó el César a la mejor actriz por su papel en La ceremonia.

Dirigida por algunos de los cineastas más reconocidos

En Francia ha trabajado bajo la dirección de algunos de los realizadores más reconocidos, como Claude Chabrol y Maurice Pialat.

En el extranjero, ha sido dirigida en particular por el austriaco Michael Haneke; los estadunidenses Michael Cimino y Otto Preminger; los italianos Marco Bellocchio y Marco Ferreri; el polaco Andrzej Wajda, o el filipino Brillante Mendoza.

Nacida el 16 de marzo de 1953 en el seno de una familia acomodada, Huppert se formó en el Conservatorio antes de debutar en el teatro.

Fue destacada por primera vez por la crítica en la obra El juez y el asesino (1976), de Bertrand Tavernier, con el papel de una mujer prometida con un juez manipulador.

Claude Chabrol se volvió uno de sus cineastas fetiches, con quien ha rodado siete películas, entre ellas Violette Nozière (Prostituta de día, señorita de noche), Madame Bovary o La ceremonia.

En el festival de Cannes, Huppert se ha llevado dos premios de actuación, en 1978 por Violette Nozière y en 2001 por La pianista, de Michael Haneke, en la que interpreta a una sádica profesora de piano. Entre su amplio abanico de interpretaciones, la actriz no ha dudado en encarnar a mujeres antipáticas, frustradas o locas.

Su próximo filme, Happy End, junto a Jean-Louis Trintignant, saldrá este año, y está a punto de empezar el rodaje de Eva, de Benoit Jacquot, cineasta que la ha dirigido cinco veces.

En el teatro ha trabajado también junto a los directores más célebres, como Bob Wilson, Jacques Lassalle o Luc Bondy.

El año pasado, sufrió la tortura del amor en Fedra, puesta en escena por el polaco Krzysztof Warlikowski.

Huppert, quien mantiene su vida privada alejada de las cámaras, es madre de tres hijos, entre ellos la actriz Lolita Chammah, con quien rodó en 2010 Copacabana, de Marc Fitoussi.