Opinión
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Astillero

Proyecto (apartidista) Dante-MC

Mancera y el cuarto polo

Bronco, Alfaro, Encinas

¿Restar a Morena; fortalecer PRD?

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MORENA EN SAN LÁZARO. Los diputados de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, encabezados por Margarita Cuata, Jesús Serrano y Jesús Álvarez, mostraron pancartas durante la discusión del proyecto de decreto que modifica la Ley de Cámaras EmpresarialesFoto Francisco Olvera
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ajo el auspicio y la escenografía del partido antes llamado Convergencia, ahora Movimiento Ciudadano (MC), propiedad política del ex gobernador veracruzano Dante Delgado Rannauro, ha arrancado una propuesta 2018 que trata de etiquetarse no sólo como apartidista sino abiertamente adversa al esquema de los partidos políticos, incluso antisistema, a pesar de que las principales figuras que participan en este coctel ocupan cargos de gobierno o de representación popular, como Miguel Ángel Mancera, quien es hoy el principal aspirante candidato presidencial de ese coctel pluripartidista.

El banderazo de salida de lo que se pretende sea una alianza plural, tuvo como marco de referencia la conmemoración de la asamblea constitutiva del partido que ahora se denomina MC, 18 años atrás. Hubo discursos del dirigente histórico, Delgado Rannauro, y del presidente municipal de Guadalajara, Enrique Alfaro. A la reunión, realizada en la Ciudad de México, asistieron los dos principales aspirantes a esa candidatura presidencial, el jefe del Gobierno capitalino, Mancera, y el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, apodado el Bronco, sentados cada uno a un lado del líder Delgado. También asistieron, según diversas reseñas periodísticas, el senador (con licencia) semiperredista Alejandro Encinas, quien busca ser candidato al gobierno del estado de México; la priísta Lorena Martínez, quien fue derrotada como candidata a gobernar Aguascalientes; los saltarines senadores perredistas Zoé Robledo y Armando Ríos Piter, y quien fue salinista presidenta del PRI nacional, María de los Ángeles Moreno.

En los hechos, el lanzamiento de la propuesta, que usa como lema La fuerza de los ciudadanos, da cuerpo a las reuniones que en meses recientes han sostenido Mancera, el Bronco, Alfaro y el presidente municipal de Morelia, Alfonso Martínez, de larga carrera en el panismo antes de declararse independiente para competir en la capital michoacana. También se inscribe dicho lanzamiento en lo que el grupo mancerista ha dado en llamar el cuarto polo, que con el ex procurador de justicia del Distrito Federal a la cabeza pelearía votos a la tercia partidista más relevante hasta ahora, integrada por PRI y sus aliados, PAN y Morena.

Aun cuando los dos principales aspirantes a esta candidatura presidencial aliancista, Mancera y Rodríguez Calderón, registran importantes bajas en popularidad respecto a sus niveles iniciales, y que en ambos casos crece el número de ciudadanos activamente opuestos a sus estilos de gobierno, el discurso seleccionado para este proyecto es de distanciamiento de los políticos tradicionales y de crítica fuerte a los partidos (como si Movimiento Ciudadano no lo fuera, o como si Mancera no tuviera a estas alturas el control a trasmano de la estructura perredista a través de su operadora, Alejandra Barrales).

Pero, más allá del apasionado discurso ciudadano, la campaña nucleada alrededor del partido Movimiento Ciudadano coloca de inicio, como uno de sus blancos, a otro partido, el denominado Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y a su virtual candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador. Si el candidato del Proyecto Dante fuera el neoleonés conocido como el Bronco, la merma de sufragios sería para el candidato presidencial priísta, pues a fin de cuentas Rodríguez Calderón se mantiene informalmente como parte de esa corriente. Pero, si se concretara lo que hoy parece más viable, con Mancera como candidato ciudadano, independiente y apartidista, entonces la dispersión de votos se daría en el flanco denominable izquierdista, pues dotaría al Partido de la Revolución Democrática de una postulación vitaminada por la concurrencia de otras fuerzas, sobre todo con implicaciones geográficas muy definidas en cuanto a potencial votante (Ciudad de México, Jalisco, Nuevo León, Estado de México, Michoacán).

En este esquema, la postulación aliancista de Mancera significaría un beneficio práctico para las candidaturas del PRI y del PAN, pues restaría sufragios a López Obrador y Morena, aparte de que el sol azteca y Movimiento Ciudadano aspirarían a conseguir una mejor recolección de votos que si se aliaran con el PAN, aunque esta posibilidad de entendimiento final, sobre todo con Margarita Zavala Gómez del Campo, no es una opción descartada. Por lo pronto, la propuesta (al estilo priísta de primero el plan y luego el hombre, recientemente rescatada por Enrique Peña Nieto) consiste en elaborar la propuesta de gobierno 2018-2024 y después, ya con esa plataforma conceptual terminada, comenzar a discutir quién sería el candidato adecuado. Claro que desde ahora todo mundo entiende que los apellidos finalistas son, en ese orden, Mancera Espinosa y... ah, Rodríguez Calderón.

En la presentación del proyecto, por cierto, el alcalde tapatío Alfaro expresó a los presentes, y en especial a Dante Delgado, que el esfuerzo por realizar podría ir por fuera o sin acompañamiento de los partidos. Tal vez haya sido solamente un lance oratorio, pero conviene recordar que el MC le debe su buen posicionamiento actual a la alta producción de votos que produjo en Jalisco el grupo que dirige Alfaro, en presidencias municipales y diputaciones de mayoría. Esa cosecha dio a la corriente alfarista el control de la bancada del MC en la cámara federal de diputados y una relativa autonomía frente a Delgado, homenajeado en términos discursivos este lunes pero, al mismo tiempo, advertido de que el tren aliancista podría correr por fuera de sus vías.

Y, mientras la tragicomedia política mexicana tiene hoy uno de sus episodios extravagantes en Cuernavaca, donde unos pujan por botar al futbolista Cuauhtémoc Blanco, quien nunca cumplió los requisitos legales para ser candidato mercantil a presidente municipal, y otros por mantenerlo en el precario poder (ya con la Corte interviniendo para estudiar el caso), ¡hasta mañana, con el titular de Sagarpa lanzando el Reto Guacamole!

Twitter: @julioastillero

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