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Ver día anteriorViernes 18 de noviembre de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Por un nuevo modelo de prevención contra la diabetes
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éxico vive una declarada emergencia sanitaria por la diabetes que reclama un nuevo modelo de prevención por parte del Estado que incluya medidas concretas para detectar y tratar oportunamente esta grave enfermedad.

Hoy enfrentamos problemas de salud distintos a los que encararon nuestros abuelos y serán más severos para la generación de los hijos y nietos, si no intervenimos de manera decidida.

Los problemas asociados al inadecuado consumo de ciertos alimentos y bebidas, la falta de actividad física y la herencia de genes que nos ponen en mayor riesgo, junto con el envejecimiento de la población, han hecho que la diabetes se convierta en el mayor problema de salud de los mexicanos y de muchos otros países en vías de desarrollo.

En el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el mayor prestador de servicios médicos del país con 74 millones de derechohabientes, y garante de la seguridad social, estamos empeñados en impulsar un nuevo esquema que nos permita cambiar a fondo el paradigma dando un viraje de lo curativo a lo preventivo.

En 2013, el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto lanzó la Estrategia Nacional para la Prevención y Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes, dando un importante paso en el combate a esta pandemia con la creación de una política pública que lidera la Secretaría de Salud como cabeza del sector.

La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2016, que levanta la Secretaría de Salud, nos permitirá conocer los avances en la prevención y contención de este mal, pero debemos dar otros pasos, ya que la situación de la diabetes mellitus en niños, jóvenes y adultos es alarmante.

En 2015 el IMSS atendió a 3.5 millones de pacientes diabéticos; murieron más de 20 mil; fueron amputados más de 4 mil, y más de 2 mil trabajadores tuvieron que dejar de trabajar de manera permanente, debido a las complicaciones, sobre todo visuales.

Once por ciento de los derechohabientes de 20 y más años (3.8 millones) padecen esta enfermedad y, aunado a la mala calidad de vida de los pacientes, el costo de su atención está desbordándose: 42 mil 776 millones de pesos en 2015, lo que representa 53 por ciento del gasto total en padecimientos crónicos.

El IMSS enfrenta esta problemática con estrategias de prevención y atención médica en mil 500 clínicas familiares, 271 hospitales y 36 unidades médicas de alta especialidad.

Con Prevenimss se realizan al año alrededor de 6 millones de mediciones de glucosa y los chequeos aumentaron de 30 a 32.2 millones, 42 por ciento más que en la administración anterior.

El control de la glucosa para esta enfermedad es fundamental para retrasar que se presenten las complicaciones propias de la enfermedad, como: lesiones en ojos, retinopatía; riñones, nefropatía; en pies, neuropatía; lo cual puede llevar a perder la vista, amputación de pies, falla en los riñones o insuficiencia renal crónica, que requerirá de diálisis peritoneal, hemodiálisis o trasplante renal.

Con este espíritu preventivo afiliamos este año a 6.6 millones de estudiantes de prepas y universidades públicas. Así mismo, con 136 módulos especializados del programa Diabetimss tratamos a los pacientes con medicamentos y los enseñamos a modificar su estilo de vida y autocontrolar la terrible enfermedad.

La diabetes es el segundo motivo de consultas de medicina familiar, después de las enfermedades del corazón. En 2015, hubo 14 millones de consultas sólo para esta enfermedad, 13 por ciento del total.

Gracias a estas acciones, en el IMSS la tasa de mortalidad ha bajado de 128 a 122 por cada 100 mil derechohabientes, mientras que en la población no derechohabiente sigue en ascenso, por lo que no podemos estar satisfechos.

En la reciente 107 Asamblea Nacional, el Presidente de la República me instruyó el diseño, la ejecución y puesta en marcha de un nuevo modelo preventivo, enfocado en la detección temprana y la promoción de estilos de vida saludables que pasan por una alimentación sana y la actividad física para combatir el sedentarismo, sobrepeso y obesidad, detonantes de 90 por ciento de los casos de diabetes.

En los primeros meses de 2017 vamos a cumplir con esta encomienda, implementando medidas concretas que realmente frenen esta emergencia.

No será con promocionales o discursos como vamos a superar este reto en el sector salud, ni vamos a seguir esperando que los pacientes sigan llegando enfermos a los hospitales para curarlos, pues no habrá dinero que alcance para construir más clínicas y tener que contratar más médicos y enfermeras.

Lo que debemos hacer es ir por nuestros derechohabientes e invitarlos a que vengan a checarse a los módulos y clínicas de prevención, antes de que se enfermen. Ahí vamos a detectar a tiempo los males crónicos, como diabetes, hipertensión arterial, cáncer de mama y cáncer de próstata. Así vamos a incrementar años de vida saludable, a salvar más vidas y a controlar el creciente gasto inercial.

Es hora de cambiar a fondo la forma tradicional en que prevenimos la diabetes y las enfermedades crónicas. En el IMSS estamos convencidos de que sí se puede y vamos a poner manos a la obra.