Espectáculos
Ver día anteriorMartes 25 de octubre de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El realizador Amat Escalante presentó La región salvaje en el festival de Morelia

Hallé en la fantasía la forma adecuada de abordar lo que sucede en México

Tenemos un monstruo presente en todo momento: la violencia hacia las personas con preferencias sexuales diferentes y las mujeres, así como el narcotráfico, afirma el cineasta guanajuatense

Foto
Demián Bichir debutó como director con la cinta Un cuento de circo ( A Circus Tale & a Love Song) en la 14 edición del Festival Internacional de Cine de Morelia. La película cuenta con las actuaciones de su sobrino José Ángel, su hermano Bruno y su padre, el director de teatro Alejandro Bichir, además de Eva Longoria. Durante una conferencia de presna, el actor informó su decisión de donar íntegramente el premio Cuervo Tradicional, dotado con 120 mil pesos, que le fue otorgado el sábado por su opera prima. Confirmó que será entregado a los padres de los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa. Bichir y Longoria, en la imagen, celebraron la develación de butacas con su nombre en el encuentro michoacanoFoto Notimex
Enviado
Periódico La Jornada
Martes 25 de octubre de 2016, p. 9

Morelia. Mich.

La película La región salvaje, de Amat Escalante, fue recibida con un ánimo elevado en su estreno en la competencia oficial del Festival Internacional de Cine de Morelia. A diferencia de sus tres primeras películas, ahora el director guanajuatense recurre a elementos fantásticos. Señaló: Siento que en México tenemos un monstruo presente en todo momento, que no sólo son la violencia y el narcotráfico, sino algo que nos afecta en todo lo demás. No es por nada la violencia tan dura hacia la gente de preferencias sexuales diferentes o hacia las mujeres. Para mí, esa era la forma adecuada de abordar estos temas.

Agregó: “Mis películas habían sido aparentemente aterrizadas, porque me gusta retratar la realidad, el momento histórico que vivo e integrarlo al mundo que creo, que en general ha sido muy apegado al que vivimos todos. En La región salvaje (con la que el cineasta ganó el León de Oro a mejor director en la pasada Mostra de Venecia) habíamos escrito Gibrán Portela y yo tres versiones sin elementos fantásticos, pero de alguna forma no me sentía completo con lo que quería contar. Después se me ocurrió que parte de la película se desarrollara en el campo con animales y cobró sentido lo que yo quería decir con todos esos elementos fantásticos, metáfora de lo que los personajes viven y lo que yo quería mostrar en la película”.

Ambigüedad

Escalante precisó: Me gusta mucho la ambigüedad para imaginar muchas cosas. A partir de ésta, de la sociedad en la que vivimos, de cómo nos comportamos, de cómo nos relacionamos, positiva o negativamente, con los demás en el país o en el mundo, entre hombres y mujeres, entre hombres y hombres, así como mujeres y mujeres.

En la charla con los medios, el director de Sangre y Los bastardos afirmó que su reciente cinta tiene influencias de Possession, del polaco Andrzej Zulawski. Mi padre me la recomendó cuando yo era muy pequeño; cuando pude conseguirla y la vi me impresionó bastante. Zulawski murió este año y no sé si de ahí me vino la idea de meter la criatura en mi película. Al principio, definitivamente, el elemento fantástico era diferente: comenzó siendo unas luces hasta llegar, por necesidad, a la criatura que envuelve al humano.

Señaló: “Creo que en general he filmado mis películas de una manera terrorífica, estoy muy influenciado por ese tipo de cine; a la par de descubrir a Herzog o Luis Buñuel, iba viendo películas de Dario Argento y por ese estilo; claro, además todas las que todos vimos, como Pesadilla en la calle del infierno y esas cosas. Realmente siento que he absorbido mucho de todos ellos...

“Algunas personas, al ver La región salvaje me han preguntado si tengo influencia del cine japonés, por ejemplo.”

Vivimos en la clasificación C

Escalante confió en que su pelícusea clasificada adecuadamente, a pesar de los desnudos y escenas sexuales. “No sé qué clasificación tendrá; lo que sí sé es que todas mis cintas han sido C, porque todo el país es clasificación C, vivimos en esa clasificación... Creo que Bastardos sin gloria recibió una menor que Heli; eso no me pareció injusto, porque una película relevante para México, que no tiene que ver con nazis ni judíos, sino con el presente, hubiera sido clasificada con esa letra por RTC, lo que provocó que fuera a verla mucho menos gente. Luego llegó ese filme de Estados Unidos, estrenó con mil 800 copias, y le dieron una clasificación más leve... es una pena”.

También se refirió a cómo fue la filmación de La región salvaje con algunas dependencias estatales que aparecen en la cinta: No tuve ningún problema, tampoco es así que a toda la gente que apoya tu película le tienes que mostrar el guión; los servidores públicos que aparecen no hacen nada malo, como tambpoco lo hacen las personas que salen en la escena en la que descubren el cuerpo de uno de los personajes. Es lógico que hubiera gente viendo cuando sacan un cuerpo de una zanja; siempre hay personas husmeando cuando pasan esas cosas.

Concluyó: He sentido que me he cansado haciendo cine, también tiene que ser parte de la sociedad, de vivir en la realidad de México. Ha habido un tope con la no respuesta, con lo escondido... no quería seguir mostrando la realidad como es, porque no es así como la percibo; por eso en esta película quise encontrar algo ligeramente fuera de ella, porque lo que aparece en la cinta, que ni siquiera es de la Tierra, lo traté como si perteneciera a ella, que fuera verosímil.