Francfort. El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, se encuentra en una polémica debido a la publicación de una presunta reunión en la que ordenó la salida de Domenico Scala, miembro del Comité y ex jefe de la Comisión de Auditoría, Conformidad y Compensación del máximo organismo, en una reunión grabada y la cinta destruida después de una junta de consejo en la Ciudad de México, el pasado 13 de mayo. Infantino podría recibir una suspensión de 90 días por la Comisión de Ética, según lo publicado por el diario Die Welt con lo revelado por Marco Villiger, encargado del departamento legal de la FIFA, al confirmar en correos electrónicos que se había cumplido la petición de Infantino para sacar a Scala, uno de los principales directivos que denunció el FIFAgate. En la investigación también se menciona que a la nueva secretaria general, Fatma Samoura, no le realizaron pruebas de integridad e historial, así como la compra de ropa y regalos de una empresa deportiva que hizo Infantino, quien tiene un salario de 1.8 millones de euros.