Con el aval de todas las fuerzas políticas, el Senado aprobó reformas legales para que todas las embarazadas que requieran atención médica de urgencia sean atendidas de forma expedita, independientemente de que sean derechohabientes de la institución a la que se presenten, a su afiliación o cualquier esquema de aseguramiento.

Las reformas a la Ley General de Salud, la Ley del Seguro Social y la del Issste, pretenden abatir la mortalidad materna y evitar que mujeres tengan que parir en la calle, por la negativa de atención en centros hospitalarios.

En el dictamen, aprobado por unanimidad, se resalta que a pesar de que el marco jurídico vigente prevé la atención de las urgencias obstétricas, y de las acciones del gobierno federal para reducir la mortalidad materno-infantil, éste sigue siendo un problema de salud pública importante.

La mortalidad materna afecta principalmente a mujeres embarazadas que no cuentan con seguridad social, en condiciones de pobreza y que residen en zonas de marginación. En ese sentido, se propone un mecanismo de portabilidad de las usuarias de los servicios públicos de salud y de seguridad social, con lo que se eliminan las barreras que persisten para el acceso a la atención efectiva y oportuna.

Al presentar el dictamen, el presidente de la Comisión de Seguridad Social, Fernando Mayans Canabal, destacó que, de acuerdo con datos del Centro Nacional de Equidad y Género y Salud Reproductiva, a escala nacional se registran 2.1 millones de embarazos cada año y alrededor de 300 mil presentan complicaciones obstétricas.

Este impacto, agregó, se traduce en 30 mil mujeres que quedan con secuelas obstétricas, que las convierten en discapacitadas, además de que mil 100 mujeres fallecen, con lo que se deja una secuela social de 3 mil huérfanos cada año.

Ello, insistió, pese a que 80 por ciento de las defunciones maternas son prevenibles.

A su vez, la presidenta de la Comisión de Salud, Maki Esther Ortiz Domínguez, aseguró que con este dictamen se promueve la cooperación entre instituciones para el mejor aprovechamiento de la capacidad instalada, en materia de prestación de servicios de salud y se garantiza la prestación de servicios médicos de urgencias, de acuerdo con la normatividad vigente.

La senadora panista reconoció que, a pesar de las reformas recientes, la atención que se brinda a las mujeres no siempre es adecuada, oportuna y eficiente. En promedio, se tienen 931 casos de mujeres que dan a luz fuera de los hospitales, añadió.