Imaginarios patrios


Foto: Francisco Palma Lagunes

Un 15 de septiembre. Una marea con ganas de gritar ¡Viva México! acude a celebrar su mexicanidad al Zócalo del Distrito Federal, no sin antes pasar por un fuerte dispositivo de seguridad donde hasta los niños son revisados. Ya adentro sólo queda esperar, pero mientras hay que mostrarse con el atavío seleccionado para la ocasión.

Es también una tarde para la representación, el performance social que da vuelo a los imaginarios sobre “lo mexicano”, con sus símbolos y personajes. Ahí están los héroes de la patria encarnados en niños, los enmascarados en el pancracio del primer cuadro, los charros en su lienzo, los sombreros, los sarapes, las banderas y hasta las mordazas.

El Zócalo de la Ciudad de México siempre ha sido ese espacio de encuentro y luchas simbólicas, de conflictos y de negociaciones, pero sobre todo de apropiaciones y reivindicaciones. Es el punto de colisión con nuestra propia identidad, a veces gastada, a veces renovada, a veces crítica.

Francisco Palma Lagunes.
Texto y fotoS