Caracas.

Venezuela ordenó el cierre de su frontera con Colombia durante 72 horas tras un ataque atribuido a grupos paramilitares colombianos que dejó tres efectivos venezolanos heridos.

El presidente Nicolás Maduro repudió el ataque y aseguró que el primer paso de una operación global será perseguir y capturar a los asesinos que emboscaron a los soldados venezolanos, y luego aplicar un plan especial humanitario para atender el éxodo migratorio desde Colombia.

Tras la decisión, que afectó la frontera entre el estado venezolano de Táchira y el departamento colombiano de Norte de Santander, el ministro del Interior de Colombia, Juan Fernando Cristo, calificó de inconveniente el cierre de la frontera y pidió la rápida reapertura para no perjudicar a los habitantes de la zona.

Maduro dijo la medianoche del miércoles que Venezuela es víctima de la peste paramilitar que ha sido traída desde Colombia, a la que, aseguró, se ha sumado el contrabando de gasolina y alimentos en la frontera.

Explicó que dos tenientes y un soldado fueron heridos en una emboscada ocurrida el miércoles en la localidad de San Antonio, que atribuyó a grupos paramilitares y contrabandistas, justo cuando los efectivos venezolanos estaban a punto de detener a los contrabandistas que pretendían llevar mercancía a Colombia.