Opinión
Ver día anteriorViernes 14 de agosto de 2015Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Penultimátum

Vargas Llosa: felicidad

E

s costumbre de los medios europeos informar cómo pasan los políticos, funcionarios y famosos sus vacaciones de verano. En Francia comentan la manera ostentosa en que las celebran el ex presidente Nicolás Sarkozy y su esposa Carla Bruni. Mientras, fiel a su estilo, el presidente socialista François Hollande lo hace discretamente. En Alemania, dan cuenta de las caminatas en la montaña de la señora Angela Merkel y su esposo. En España, cómo la nueva familia real prefiere la playa y destacan la ausencia del ex rey Juan Carlos, quien disfruta con amigos su nueva vida. Hasta el presidente Rajoy se da baños de pueblo en busca de votos para su relección montando en bicicleta, caminando y nadando.

También en España los medios, con excepción del diario El País, se refieren a las vacaciones de la familia de un famoso escritor que con frecuencia ocupa más la atención por sus opiniones políticas: Mario Vargas Llosa.

Fue la prensa del corazón la primera en contar hace cuatro meses los pormenores del rompimiento del Nobel de Literatura con Patricia, su compañera de vida por medio siglo. Todo indica que la relación entre ambos había llegado a un punto sin retorno y que, como afirma la compositora Consuelo Velázquez en Amar y vivir: se vive solamente una vez, hay que aprender a querer y a vivir.

Quien le ha devuelto la felicidad al escritor es Isabel Preysler, la ex modelo y socialité filipina nacida en 1951, que saltó a la fama al casarse cuando tenía 20 años con el cantante Julio Iglesias. Tuvieron tres hijos y se divorciaron en 1978. Reincidió en el matrimonio con el marqués de Griñón, con quien procreó una hija. Se separaron pronto. Después se casó con Miguel Boyer, ex ministro de Hacienda de España, quien falleció el año pasado.

Todos los medios, menos El País, cuentan que Isabel y Mario disfrutan  felices su noviazgo. Lo prueba su viaje a Lisboa, donde el también marqués confirmó que la relación va muy bien. Pero mientras los hijos de la socialité la aprueban, pues su madre ha vuelto a renacer, los tres vástagos del Nobel cerraron filas en torno a Patricia y lo expresaron públicamente al pasar con ella este verano. Aunque Álvaro, el mayor, y aliado en las empresas políticas de su padre, lo apoya en su decisión de emprender nueva vida.

No quiero arrepentirme después de lo que pudo haber sido y no fue, sostiene la autora de Bésame mucho. Cualquiera que sea el final de este romance, no dude el lector que Vargas Llosa sabrá novelarlo a su debido tiempo. Ya narró los pormenores de su matrimonio con su tía en La tía Julia y el escribidor. Más recientemente, su andanzas amorosas en París y Madrid en Travesuras de la niña mala.

Se ignora cómo termine lo relacionado con el patrimonio del Nobel, unos 12 millones de dólares. La llave la tiene Patricia.