El dirigente nacional priísta, César Camacho Quiroz, aseveró ayer por la noche que la jornada electoral fue positiva, avanzamos en el número de diputados de mayoría relativa al pasar de 174 actuales a más de 180 en esta elección. Y la buena noticia es que los episodios de violencia y las amenazas fueron detenidos por la política.

Asimismo, en entrevista con medios electrónicos, Camacho Quiroz aseguró que el PRI recuperó Sonora y Guerrero y estamos en la pelea, con resultados muy cerrados, en Nuevo León, Querétaro y Michoacán.

Estas declaraciones las formuló a noticiarios electrónicos a las 23 horas. Sin embargo, y pese a que el PRI instaló una sala de prensa para más de 50 medios con computadoras y 11 pantallas, dos de ellas gigantes, ni el dirigente nacional ni ningún otro funcionario del tricolor se presentaron ante los reporteros durante el día.

La sala abrió sus puertas a las ocho de la mañana y comunicación social del PRI sólo difundió fotos y la entrevista del dirigente nacional al emitir su voto por la mañana en Metepec, estado de México. Después de eso la dirigencia guardó silencio.

A las 14 horas, en los pasillos del PRI, funcionarios cercanos a la dirigencia rumoraban: “El Bronco, Jaime Rodríguez, candidato independiente al gobierno de Nuevo León, va cinco puntos arriba de la candidata del tricolor, Ivonne Álvarez. Hay preocupación”.

Horas más tarde, esos mismos funcionarios comentaban: “La ventaja de El Bronco es de nueve puntos sobre el PRI; aumenta la preocupación en la dirigencia”.

A partir de las 18 horas, en las pantallas instaladas en la sala de prensa, uno a uno de los nueve candidatos a gobernador fueron haciendo su aparición y se declararon ganadores. La primera en hacerlo fue la candidata al gobierno de Nuevo León, quien dijo: El PRI va arriba, pero la votación es muy cerrada.

Luego aparecieron en las pantallas los otros candidatos: Colima, Michoacán, y también se declararon ganadores. Sin embargo, al anunciar su victoria no reflejaban haber triunfado. Distinto fue el caso de Guerrero, donde el candidato Héctor Astudillo se declaró ganador entre gritos y porras; su equipo no podía esconder su satisfacción.

El de Querétaro también anunció su triunfo. Ambiente de fiesta fueron los anuncios de Sonora y Campeche. No sucedió lo mismo con las victorias en San Luis Potosí y Baja California Sur. Con gesto adusto se hicieron estos anuncios.

Hasta el cierre de esta edición, el dirigente nacional no se había presentado en la sala de prensa.