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Cientos de miles de candados metálicos son cortados; se piensa reciclarlos, dice funcionario

Retiran las peligrosas toneladas del amor del parisino Puente de las Artes

Es como si se sacara el patrimonio de la capital francesa, creado por las personas, afirma un turista

Las rejas de la baranda en el Sena serán remplazadas por arte callejero, anuncian

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Baranda en el famoso Puente de las Artes en París, donde los amantes colocaron miles de candados. El ayuntamiento sostiene que esos objetos metálicos pueden causar daños al patrimonio de la ciudad luz y son un riesgo para la seguridad de las personasFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Martes 2 de junio de 2015, p. 7

París.

Adiós a los juramentos de amor eterno encadenados sobre el Sena: la alcaldía de París empezó a retirar el lunes los cientos de miles de candados del amor que las parejas colgaban en el célebre Puente de las Artes.

Punto final para las barandas sobrecargadas de cerrojos de todos tipos y colores. Ya no habrá llaves lanzadas teatralmente al río.

La pasarela respira, liberada de entre 700 mil y un millón de objetos metálicos, que pesaban 45 toneladas. Hace un año, una parte del enrejado de la baranda se cayó, vencida por el peso del amor.

París debe seguir siendo la capital del amor... Que las parejas sigan declarándose su pasión, pidiéndose matrimonio, quizás en el Puente de las Artes. Pero, por favor, sin poner candados, exhorta Bruno Julliard, vicealcalde de la capital a cargo de la Cultura.

Desde ayer por la mañana, los servicios municipales trabajan en el puente, cortando con sierras para metales las rejas con candados y cargándolas en camiones. Estamos reflexionando sobre los posibles medios de reciclarlos, dice Julliard, precisando que no serán tirados.

La tarea, que obliga a cerrar el puente una semana, permitirá a los turistas recuperar esta magnífica perspectiva.

En efecto, el Puente de las Artes ofrece una de las más bellas vistas de la capital francesa, con la perspectiva del río, el museo del Louvre y las torres de la catedral Notre Dame.

Las rejas de la baranda serán remplazadas por obras de arte callejero, después serán instalados definitivamente paneles de vidrio en su lugar.

Las peligrosas toneladas del amor

Puse aquí un candado hace 10 años, recuerda Feruccio, italiano de 43 años que visita París con su esposa.

Para Yilmaz, que puso un candado en 2010, retirarlos es como si se sacara el patrimonio de París, creado por la gente. Es un arte del pueblo. Eso era lo bello, afirma.

Temiendo un accidente ante el peso agregado al puente, dos estadunidenses lanzaron en marzo de 2014 una petición: No love, no lock, que fue firmada por 10 mil personas, en reclamo del retiro de los cerrojos que afearon el puente. Afirmaban que se trata de una moda horrible y peligrosa que desnaturaliza el verdadero París y lo transforma en Disneylandia.

Y en efecto, pocos meses después, el 8 de junio de 2014, una parte de la reja de la baranda del puente se cayó por el peso de los candados.

El puente debió ser evacuado, y la alcaldía retiró 37 rejas, cada una cargada con media tonelada de candados. Una parte de las rejas fue remplazada por paneles de vidrio.

Como alternativa, la alcaldía realizó una campaña para alentar las selfies, en remplazo de los candados, y publicarlas, acompañadas del hashtag #lovewithoutlocks.

El rito de los candados que simbolizan el amor eterno habría empezado en Roma, popularizado por dos novelas rosas en la que los personajes ponen uno con sus nombres en el farol de un puente y tiran la llave al Tíber.

En París, la epidemia empezó a propagarse en 2008 entre parejas del mundo que adoptaron la moda. Después del Puente de las Artes pasó a otros puentes del Sena e incluso a barrios raramente frecuentados por los turistas.

Vendedores ambulantes y kioscos cercanos a la pasarela olfatearon rápidamente el negocio y se pusieron a vender candados.

París seguirá retirando uno a uno todos los candados de todos los puentes, promete Julliard.