Paisajes, situaciones de la era digital y enormes figuras sobre temas de identidad, conciencia ambiental y social, invadirán los muros de la zona peatonal de Regina , San Jerónimo y el callejón San Simón, así como la pared del Centro de Desarrollo Infantil (Cendi) de la estación Pino Suárez del Metro, en el Centro Histórico de la ciudad de México, como parte de la tercera edición del Festival Ilústram’esta.

Con estilos particulares de arte urbano como la gráfica monumental, el posgrafiti o neo-muralismo, ilustradores, diseñadores y artistas visuales, en su mayoría jóvenes de 18 a 25 años, plasmarán a partir de hoy, en los muros del corazón de la ciudad de México, el descontento social por la violencia que vive el país, sus inquietudes en torno al daño que se provoca al planeta, problemas ecológicos que afectan a la sociedad y las tradiciones con que se identifican.

El Festival Ilústram’esta, que cuenta con el apoyo del Fideicomiso Centro Histórico, además del circuito de artistas urbanos, incluyó un concurso de diseño de playeras y un encuentro sobre arte y diseño, que se realizó ayer en el teatro Ciudadela.

Uno de los propósitos de la propuesta es generar nuevas ideas sobre identidad, conciencia ambiental y social mediante las temáticas del certamen, que se difundieron mediante los hashtags: #actualizaMéxico, #piensaverde y #propónyprotesta.

El artista mexicano Omar Inzunza, conocido como Gran Om, quien en colaboración con otros creadores intervendrá uno de los muros de la ciudad con la obra La diversidad nos hace fuertes, considera que el proyecto Ilústram’esta refleja la inquietud y preocupación social de las nuevas generaciones y no sólo se enfoca en el ejercicio estético de los artistas, ya que existe un mensaje claro en las propuestas artísticas.

“El street art –explica Gran Om– no sólo tiene que ver con el ejercicio de creación en general: diseñadores, grafiteros, muralistas, todos ofrecen una gama muy interesante. Tampoco pretendo descalificar ninguna ejecución artística o forma de creación, pero considero que el arte debe estar al servicio del público. Cualquier ejercicio de creación debe ir en función del otro y de los procesos sociales.”

Desde que comenzó a trabajar tanto en gráfica como en video. Inzunza se ha enfocado en exaltar el derecho a la protesta.

En entrevista con La Jornada, recuerda que sus primeros carteles surgieron a partir de los movimientos en defensa del desierto de Wirikuta y de lo que sucedió en Ayotzinapa, donde la gente se apropió de su gráfica.

Sobre las temáticas que se abordan en esta edición, Aristeo Pantoja, coordinador del festival e integrante de la Asamblea para la Cultura y la Democracia AC (ACUDE), aclara que el propósito fue innovar mediante los estilos gráficos, memes relacionados con México, con el gobierno; la forma en que se percibe a los pueblos indígenas y los movimientos que han surgido en defensa de los animales y del medio ambiente.

El arte que plasmarán los artistas en diversos espacios del Centro Histórico tienen atrás la escuela muralista y la de la gráfica mexicana, así como el paisaje, asimiladas por las nuevas generaciones, porque las tendencias recientes del arte urbano se han ampliado, señala Pantoja.

Respecto de Ilústram’esta, Ricardo Bautista, director de Promoción y Difusión del Fideicomiso Centro Histórico, dijo que este año es la primera vez que se realiza dicho encuentro artístico en el primer cuadro del Distrito Fedral.

Indicó que desde 2009 el Fideicomiso cuenta con el programa Murales artísticos en Regina y San Jerónimo, para que los jóvenes se apropien del espacio público; en esta ocasión la organización ACUDE solicitó permiso para intervenir los muros.

Artistas como Posmotitlán, Ely Ely, Mostasho, Raúl Urias, Mocre y Xchamz intervendrán los muros de las calles de Regina, mientras Metzican invadirá con su arte las paredes de San Jerónimo, al igual que Hidroc. En el Cendi de la estación Pino Suárez del Metro plasmarán su obra Wina, Netoplasma y N30.

El circuito de arte gráfico en los muros del Centro Histórico se realizará del 15 al 21 de marzo y la obra permanecerá dos meses en esos espacios, para combatir la opinión negativa que concibe al arte urbano como expresión decadente y vandálica.