Miami. Un sexto hombre se declaró culpable por su participación en una conspiración para suministrar fármacos y mejorar el rendimiento de peloteros de Grandes Ligas y otros atletas. Juan Carlos Núñez aceptó que conspiró para distribuir testosterona, delito que conlleva una sentencia máxima de 10 años de prisión. Los documentos judiciales revelan que Núñez envió a varios jugadores a la ahora desaparecida clínica Biogenesis of America, administrada por Anthony Bosch. Muchos peloteros son dominicanos y venezolanos.