Directora General: Carmen Lira Saade
Director Fundador: Carlos Payán Velver
Suplemento Mensual  Director: Iván Restrepo
Edición: Laura Angulo   29 de septiembre de 2014
Número Especial

Portada

Presentación

Erosión costera en la península de Yucatán: las lecciones que no se aprenden
Ismael Mariño Tapia

Protección del tiburón ballena en el área de flora y fauna Yum Balam
Ricardo Torres Lara y Genny Paredes Alcocer

Solicitaron proteger Holbox pero...

Holbox: una mirada a través de la basura
Emma R. Alonzo Marrufo

Un desarrollo sostenible impulsado por un turismo responsable
Patricio Martin

Yum Balam: oportunidad para el turismo sustentable
Alejandra Serrano Pavón

Holbox, parte de un área natural protegida de flora y fauna

Los problemas de Holbox, noticia en la prensa mundial


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Holbox, parte de un área natural protegida de flora y fauna

Se trata de Yum-Balam, decretada justo hace 20 años por el presidente Salinas de Gortari. Tiene una superficie de 154 mil hectáreas, de las cuales la mayoría es ejidal. Sus pobladores son de origen maya dedicados a la pesca y la agricultura tradicional, la apicultura y la extracción de madera.

Varios centros de investigación han clasificado la importante biodiversidad que existe en Yum-Balam y que se localiza en Holbox, en los humedales y sabanas, y en la selva mediana y baja. Además, en el área natural protegida están los acuíferos más importantes del norte de Quintana Roo, motivo por el cual los especialistas recuerdan la necesidad de no permitir allí desarrollos turísticos.

Yum-Balam es asiento y lugar de paso de más de 30 aves migratorias; su fauna comprende más de 300 especies ya clasificadas, entre las cuales destaca el mono araña y el pavo ocelado, el tapir, el jaguar, el puma, dos especies de cocodrilos, el pavo de monte, el hocofaisán, el zopilote rey, el manatí, las tortugas carey, blanca, caguama y laúd, y la perdiz de Yucatán. Más 14 especies de anfibios, 67 de reptiles y 22 mamíferos silvestres, tres de ellos amenazados o en peligro de desaparecer. Las autoridades ambientales señalan que una de las amenazas a esa enorme riqueza son los megaproyectos turísticos.