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El escritor fue hospitalizado el jueves pasado; los médicos sospechan de neumonía o influenza

Federico Campbell, en estado crítico y sin diagnóstico certero, dice su esposa

Carmen Gaitán agradeció los gestos de cariño que ha recibido de la comunidad cultural

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Federico Campbell en una entrevista con este diario en septiembre de 2003Foto Roberto García Ortiz
 
Periódico La Jornada
Domingo 2 de febrero de 2014, p. 3

El escritor y periodista Federico Campbell se encuentra internado en el área de terapia intensiva del Hospital Mocel, de la ciudad de México. Al cierre de esta edición, su estado era crítico y sin un diagnóstico médico certero de la enfermedad que lo aqueja, se sospecha de neumonía o incluso de influenza, informó su esposa Carmen Gaitán Rojo.

El hombre de letras, de 72 años de edad, visitó en días recientes Tijuana, su ciudad natal, donde dictó una conferencia sobre la obra de Juan Rulfo, y el pasado lunes fue nombrado Presidente Honorario de la edición 32 de la Feria del Libro de esta ciudad fronteriza.

Gaitán relató que durante la charla que ofreció el viernes 24 de enero en el Centro Cultural Tijuana (CECUT) presentaba ligeros malestares que no mermaron su actividad. Los siguientes días viajaron a Tecate para acudir al taller del artista Álvaro Blancarte y viajaron por carretera a la ciudad de Los Ángeles para visitar el Country Museum of Art en Estados Unidos.

Al llegar a la ciudad de México su estado comenzó a decaer drásticamente, por lo que el jueves fue internado en el Hospital Mocel. Actualmente está inconsciente, con respiración asistida, además de que presenta problemas renales, detalló su esposa, quien agradeció los gestos de preocupación y de cariño que ha recibido de miembros de la comunidad cultural, como Carlos Payán, Rafael Tovar y de Teresa, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, David Huerta y su editor Martín Solares, entre otros.

Campbell nació el primero de julio de 1941. Figura ineludible de la literatura mexicana contemporánea fue descrito el periodista, editor, ensayista y narrador por el Instituto Nacional de Bellas Artes al rendirle un reconocimiento a su trayectoria en 2011. Escritor incansable, Federico Campbell encuentra en el ejercicio de la literatura una manera de definirse a sí mismo y una manera de dar sentido al mundo, señaló.

También en 2011, en la 32 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería se le rindió un homenaje con motivo de sus 70 años de vida.

Si de algo sirve la literatura, es de herramienta para establecer conexiones, organizar los pensamientos y las ideas. No tiene otro propósito, escribió Campbell en su texto La memoria de Sciacia (FCE, 1989), que se une a una obra reunida en decenas de libros que transitan por la narrativa, el ensayo y el periodismo.

Realizó estudios, inconclusos, como se aclara en su página personal, de derecho y filosofía en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). En 1995 obtuvo la beca J.S. Guggenheim.

En 1977 fundó la editorial La Máquina de Escribir. Ha publicado las novelas Todo lo de las focas (1983), Pretexta o el cronista enmascarado (1979), Transpeninsular (2000), obra por la que ganó el Premio de Narrativa Colima, y La clave Morse (2001). En el género de ensayo destacan La memoria de Sciascia (1989), Post scriptum triste (1994) y Padre y memoria (2009). En materia de cuento publicó Tijuanenses (1997). Ha traducido obras dramatúrgicas de Harold Pinter, David Mamet y Leonardo Sciascia.

En materia periodística ha colaborado en diarios y revistas nacionales como La Jornada y Proceso. Actualmente escribe la columna semanal La hora del lobo. “La entrevista es una interlocución y nuestro pensamiento se iría por otro camino si no intervinieran la voz, la inteligencia, la malicia, la curiosidad y el asombro del otro. Una de las fascinaciones del periodismo –aparte de los viajes– es que a uno le cuentan historias y siente que vive otras vidas y otros tiempos”, afirmó a este diario en 2004 con motivo de la reedición de su libro Conversaciones con escritores.