Deportes
Ver día anteriorViernes 5 de julio de 2013Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

En Guadalajara, si practicas futbol piensan que eres lesbiana: Xóchitl

Jugar con el corazón me sacó de las drogas, dice Miguel Ángel Pérez
Foto
Miguel Ángel representa al estado de Oaxaca en el torneoFoto AC Supera
 
Periódico La Jornada
Viernes 5 de julio de 2013, p. a13

La droga te hace sentir bien, te mantiene tranquilo, pero también te destruye, dice el jugador Miguel Ángel Pérez, delantero del equipo que representa a Oaxaca en el torneo De la Calle a la Cancha, que se lleva a cabo en el Zócalo capitalino y es organizado por Fundación Telmex en apoyo a jóvenes marginados.

Miguel Ángel vivió rodeado de alcoholismo y drogadicción desde su infancia, cuando su padre golpeaba a su madre. Sin embargo, al entrar a un campo de futbol y dominar el balón con los pies, podía olvidar aunque sea por 15 o 30 minutos los problemas familiares, ahí sacaba todo, me ponía contento.

Ahora, a sus 31 años, narra que por medio del balompié desde 2010 dejé de drogarme e incluso formó un equipo que ayuda a jóvenes entre 11 y 21 años involucrados en el consumo de estupefacientes.

Soy de una comunidad que se llama San Martín Mexicapan, es una de las zonas más conflictivas. Encuentras drogas, alcohol y pandillerismo. Tuve una niñez un poquito complicada, ver a mi papá golpear a mi mamá me afectó mucho y me fui descarrilando. A los 12 años empecé a beber alcohol y después ya consumía droga, en específico cocaína, relata.

No obstante, su pasión como futbolista nunca la perdió y esa misma emoción fue la que lo impulsó a cambiar su estilo de vida: Hace tres años inicié un club de futbol, en el que apoyo a niños con adicciones. La mayoría ha sufrido maltrato y eso origina que se vayan hacia las drogas. Yo les cuento mi historia y ellos ven que los puedo comprender.

Aunque gran parte de su vida estuvo marcada por sombras, menciona que el balompié ha sido esencial, pues a través de él ha sobrevivido: Lo que me saca adelante es jugar con el corazón, es lo que más vale, el uniforme no cuenta, puedo hacerlo descalzo.

Mientras Pérez persiste en su anhelo de ayudar en la prevención de drogas y evitar el maltrato infantil, en la cancha de al lado juega el equipo femenil de Jalisco, donde se desempeña Xochitl García, una fuerte jugadora que no suelta el balón, pese a las criticas de una sociedad conservadora a la que se enfrenta en Guadalajara.

Con tristeza comenta que en la capital tapatía no hay mucho futbol femenil porque piensan que si eres mujer y juegas eres lesbiana. Algunas compañeras no vinieron porque sus novios no les permiten jugar, pero deberían ver que este deporte es divertido y también te puede ayudar en la vida.