Como parte de los lineamientos para la destrucción de los paquetes de los comicios federales de 2006 y 2012, el Instituto Federal Electoral (IFE) autorizó la conservación de alrededor de 90 mil –correspondientes a los procesos presidencial y de senadores y diputados de este año– para la realización de estudios sobre comportamiento del sufragio, errores en la votación en el caso de las coaliciones parciales, voto nulo y llenado de actas por los funcionarios de casilla.

El consejero Marco Antonio Baños mencionó que, como ocurrió en 2003 y 2009, el Consejo General aprobó realizar estudios que permitan revisar diversos aspectos de la organización electoral para buscar enmendar posibles errores o mejorar esquemas de capacitación. Precisó que entre estos estudios destaca uno relacionado específicamente con las boletas, para lo cual se apartarán 90 mil paquetes del proceso de 2012 –hay casi 430 mil–, es decir, 30 mil de cada uno de los tipos de elección efectuados.

Baños también se refirió a la demanda del PRD de acceder a la paquetería de 2006, sobre lo cual consideró que de las mil 274 solicitudes legítimas de acceso que recibió el instituto, en todos los casos, los recursos legales interpuestos a escalas nacional e internacional han ratificado la postura del IFE de negar el acceso, con base en la legislación vigente.

Sin embargo, el consejero consideró que en su momento, cuando se determinó la negativa a abrir los paquetes ante las solicitudes de información, hubiera sido preferible concederlas, porque eso hubiera permitido que existiera menos revuelta social y más gobernabilidad en aquellos años. En su momento consideré que era más importante la apertura de paquetes electorales, por razones de gobernabilidad y de legitimidad de la elección, pero al paso del tiempo creo que es mejor la destrucción.

Su explicación radica no sólo en los criterios legales adoptados por diversas instancias, sino por el deterioro que ha registrado la documentación electoral con el paso del tiempo. Hacia finales de 2010, cuando se concentró bajo custodia de las 32 juntas locales, y no en los 300 distritos, el IFE reportó daños en 17 por ciento de los paquetes porque ha habido plagas, las condiciones en que se encuentran y el uso –en aquel entonces– del crayón, que ahora dificultarían una correcta información.

La destrucción de la paquetería electoral implicará el reciclamiento de casi mil 957 toneladas de papel, a un costo de 5.1 millones de pesos, de los cuales el IFE espera poder recuperar alrededor de 8 por ciento, es decir, cerca de 400 mil pesos. Todo ello dependerá de los procesos de licitación que cada una de las 300 juntas distritales (por lo que hace a las elecciones 2012) y 32 juntas locales (en lo concerniente a las elecciones de 2006) determinen.

Explicó que uno de los factores que han favorecido la destrucción total de los paquetes de 2006 y 2012 (los de 2009 ya fueron destruidos en su momento) es que en todos los casos –332– la documentación se encuentra bajo custodia militar, por lo que el Ejército y la Marina han solicitado al IFE la liberación del personal comisionado. En cada uno de los almacenes hay 14 soldados, por lo que están adscritos a este vigilancia alrededor de 5 mil.