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Cerró sede en Unesco, mientras el embajador en España ganaba más que Rodríguez Zapatero

Con Calderón, seis años de ahorro y dispendio en actividades diplomáticas

Ejemplo de la menor presencia de México es su ausencia en las pláticas de paz colombianas

 
Periódico La Jornada
Miércoles 10 de octubre de 2012, p. 12

A lo largo de las administraciones panistas, el gobierno federal ha justificado el cierre de representaciones diplomáticas por una reducción en su presupuesto, aunque al mismo tiempo incrementó recursos a legaciones, como la del Vaticano, o pagó a sus embajadores salarios que rebasan incluso los que percibe el Presidente del país al que fueron asignados. Uno de los cierres más cuestionados en la administración de Felipe Calderón fue la oficina de México ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), con el argumento de que se trataba de economizar el gasto de la cancillería.

Explicó que al concentrar las funciones de esa oficina en la embajada de México en Francia, se ahorra el salario del representante permanente a nivel de embajador, sus gastos de orden social, la renta de la residencia oficial y su personal, el automóvil y los servicios básicos.

También fueron cerrados los consulados de México en Guayaquil, Ecuador; Porto Alegre, Brasil, y Guatemala, entre otros. No obstante, la necesidad que adujo en su momento la cancillería para economizar en España, el entonces embajador, Jorge Zermeño, ganaba 13 mil 223 dólares mensuales, frente a los 9 mil 820 que percibía el entonces presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero.

Esta política de recortes presupuestales a la cancillería se inició en el sexenio de Vicente Fox, quien obligó al personal asignado a las embajadas y consulados a efectuar una diplomacia económica, para atraer inversiones al país, pero sin descuidar sus tareas originalmente encomendadas y, además, sin mayor presupuesto.

Seis años después y a pesar del anuncio de Felipe Calderón para tener más México en el mundo, la realidad es que los recortes se mantuvieron y las obligaciones de los servidores públicos asignados a las representaciones diplomáticas se incrementaron.

Ejemplo de la menor presencia de México en el mundo es su ausencia en el diálogo de paz entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno de Colombia, que promueven Cuba y Noruega, entre otros países.

Oficinas en el mundo

En la actualidad, el total de las representaciones de México en el exterior suman 149. De éstas, 75 son embajadas, seis en organismos internacionales, 30 consulados generales, 35 consulados de carrera, una agencia consular y tres oficinas de enlace.

Con datos al 10 de septiembre de 2012, durante la presente administración sólo se abrieron cinco embajadas en Etiopía, Guyana, Nigeria, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait, además de siete consulados en Estados Unidos y dos en Canadá.

Destaca la alta concentración de consulados de México en Estados Unidos, ya que de los 67 que tiene el país, 52 están radicados en territorio estadunidense, dejando sólo 15 para el resto del mundo.

Paradójicamente en China, país que está a la cabeza del desarrollo económico y tecnológico en la región de Asia-Pacífico, México cuenta con apenas cuatro representaciones diplomáticas, mientras Brasil tiene alrededor de 12.