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Confía Obama en que el caso se resuelva de forma pacífica

Continuará la presión del G-8 contra el plan nuclear de Irán

Abogan las naciones por un proceso político desde Damasco

 
Periódico La Jornada
Domingo 20 de mayo de 2012, p. 25

Washington, 19 de mayo. El presidente estadunidense Barack Obama afirmó hoy que los líderes del Grupo de los Ocho (G-8) están unidos y se comprometieron a continuar con la actual política de sanciones, presiones y discusiones diplomáticas con Irán en torno a su controvertido programa nuclear, en la segunda jornada de la cumbre realizada en Campo David.

Estamos unidos en nuestra posición. Pienso que concordamos en que Irán tiene derecho a un programa nuclear pacífico, pero que sus continuas violaciones a las normas internacionales y su incapacidad de probar que no trata de militarizarlo, constituye un grave motivo de inquietud para todos, afirmó.

A unos días de que se realice en Bagdad la reunión del llamado Grupo de los Seis (Estados Unidos, Francia, Rusia, Gran Bretaña, China y Alemania) con Irán, Obama sostuvo: “Esperamos poder resolver este problema en forma pacífica, que se respete la soberanía de Irán y sus derechos en el seno de la comunidad internacional, pero que (la república islámica) reconozca también sus responsabilidades.

Hacemos un llamado para que Irán tome esta oportunidad que nació en Estambul, y que mantenga una postura abierta en Bagdad participando en discusiones en profundidad sobre medidas concretas en el corto plazo, con miras a una solución amplia y negociada que restaure la confianza internacional sobre que el programa nuclear iraní es netamente pacífico, expresaron los mandatarios del G-8 en el comunicado final. Además, instaron a Teherán a respetar los derechos humanos.

Obama añadió que los miembros del G-8 abogan por que en Siria se dé un rápido proceso político, que ha sido escenario desde hace un año de una revuelta popular, y que respaldan el plan que el enviado de la ONU a aquel país, Kofi Annan, elaboró para poner fin a la violencia.

El G-8 se dijo aterrorizado por la pérdida de vidas, la crisis humanitaria y los abusos en materia de derechos humanos, y exhortó al gobierno sirio y a todas las partes a adherirse inmediata y totalmente al plan internacional que apunta a poner fin al conflicto.

Al abogar por una transición política y pacífica, Obama fue más allá al insistir en que el presidente sirio Bashar Assad debe dejar el poder y citó a Yemen como modelo de transición.

Otros temas abordados en esta cumbre de las principales economías del mundo fueron los de Corea del Norte y Myanmar. Sobre Norcorea, Obama dijo que había consenso entre ellos para que esa nación asiática siga aislada de la comunidad internacional mientras mantenga su programa de enriquecimiento de uranio.

En cuanto a Myanmar (antes Birmania), el mandatario estadunidense indicó que la situación era alentadora, al señalar que todos nosotros estamos optimistas de que el proceso político y las transformaciones iniciadas echen raíces.

Los líderes discutieron además temas de género como el empoderamiento de las mujeres, así como el de los energéticos y la incertidumbre de los mercados petroleros.