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El defensa Carlos Salcido recibió un botellazo en la cabeza al arribar al estadio

Agresión y pasillo a Tigres, que arranca el empate al Cruz Azul

Espera Ferretti que se apliquen medidas de seguridad

Bravo salió de cambio entre abucheos

Foto
El delantero Omar Bravo (centro) debutó con La MáquinaFoto Roberto García Ortiz
 
Periódico La Jornada
Domingo 8 de enero de 2012, p. a13

El campeón Tigres arrebató un punto al Cruz Azul, en choque entre equipos de cementeras que terminó 1-1 al arranque del certamen, y donde el técnico Enrique Meza ofreció una disculpa pública por la agresión sufrida por el defensa felino Carlos Salcido, quien recibió un botellazo en la cabeza al descender del autobús en que llegaron los regiomontanos al estadio Azul.

Sobre el incidente, Ricardo Ferretti, timonel visitante, dijo que espera alguna acción de las autoridades del club celeste, y comentó: Es un estadio bastante bonito, pero la llegada es un poco insegura y de ello se aprovechan los seudoaficionados, bandidos, cobardes.

Las anotaciones fueron obra de Christian Giménez, al minuto seis, y de Lucas Lobos, al 70, para que los cuadros sumaran su primer punto de la campaña.

Ferretti intentó evadir el pasillo, pues fue el último en salir del túnel inflable, cuando ya los jugadores deshacían la valla; sin embargo, ahí estaba un paciente Enrique Meza, quien lo recibió con un abrazo de felicitación.

La bienvenida al monarca no fue de alfombra, aplausos y caravanas, porque al bajar del camión amarillo con el escudo de Tigres, una botella de vidrio se estampó en la cabeza de Salcido; no obstante, el golpe no le impidió jugar.

La nutrida porra norteña –unas tres mil personas– arengó con el cántico de Dale campeón, dale, dale campeón, daleee campeóoon, pero en la cancha La Máquina tomó la delantera en el marcador tras una falta fuera del área. Chaco Giménez perforó la meta de Enrique Palos con soberbio disparo que se incrustó a la izquierda, aunque la acción defensiva del portero se quedó corta.

Los monarcas tuvieron algunos titubeos ante la meta local con envíos desviados, directo al portero o sin fuerza. Al minuto 19, Lucas Lobos, capitán felino, cobró una falta y cimbró el larguero, y al 41 Héctor Mancilla de nuevo estrelló el balón en el travesaño, para dejar ir una nueva e increíble opción antes del silbatazo del descanso.

Ese par de desaciertos bastaron para que Ferretti decidiera sacar al atacante chileno y metió a Alan Pulido; más tarde, al 57 sacó al defensa Jesús Dueñas y puso en su sitio a Fernando Navarro. Meza también movió sus fichas y sustituyó a Alejandro Vela por Héctor Gutiérrez.

Omar Bravo, debutante con la playera celeste, mostró movilidad y enjundia, pero su ansiedad lo consumió, nada pudo hacer y salió del campo entre abucheos, al minuto 81. Más cerca de anotar estuvo Emanuel Villa, a quien le anularon un gol al 67 por cometer falta sobre el defensa Navarro.

Cuando parecía que Cruz Azul tenía todo bajo control, Jorge Torres Nilo descolgó por la izquierda, sacó centro a segundo poste, donde Pulido recentró para Lobos, quien aplicó un punterazo exacto, casi a bocajarro, para imponer el 1-1.

El estallido en la tribuna visitante fue descomunal, los aficionados se quitaron las playeras que agitaron al aire, brincaron y cantaron. Con ese impulso, Pulido disparó a gol, Jesús Corona rechazó luego dos remates, y cuando Damián Álvarez se disponía a tirar por tercera vez, Cata Domínguez se barrió para desviar.

Tigres se fue al ataque y al minuto 85 anidó el balón en las redes, pero la acción fue anulada por previa falta. En la recta final los Cementeros dejaron ir otra ocasión: Villa abanicó sin conectar la pelota y Chuletita Orozco tampoco acertó.

Ferretti declaró: Fue un partido difícil, contra un gran equipo, aunque tal vez las opciones más claras fueron para nosotros, y consideró que el empate es regular. No nos vamos contentos; tampoco insatisfechos. Agradeció el gesto noble del pasillo y el apoyo de su afición, aunque una vez más rechazó cualquier homenaje personal, ante los rumores de que se pretende poner su nombre a una calle en Monterrey. Ninguno de nosotros merece algo individualmente, precisó.

Meza consideró que se sacaron un premio con el empate, pues Tigres fue mejor durante casi todo el partido, y dijo que su plantel caminó en retroceso, pues había estado mejor en la pretemporada, aunque atribuyó ese aspecto a la calidad del rival, por algo son los campeones, y reconoció que Cruz Azul tiene que mejorar mucho.

Respecto de Omar Bravo, lo justificó: Tenía tiempo sin actividad... Va a jugar bien, tiene una voluntad a prueba de todo.