El uso de drogas legales e ilegales es mayor entre personas que trabajan con respecto a la población general. Así lo demuestran investigaciones del Instituto Nacional de Siquiatría, afirmó el secretario de Salud, Salomón Chertoriviski.

En el primer caso, el funcionario se refirió al consumo de tabaco, principalmente entre trabajadoras, cuyos niveles superan a los reportados entre amas de casa. Una situación similar se presenta en la ingesta de alcohol, dijo durante la ceremonia en que se presentó la estrategia Prevención de adicciones en el ámbito laboral.

La atención del problema es una prioridad porque se trata de proteger la salud de quienes representan la principal fuente de ingresos en los hogares, indicó.

Con la finalidad de ofrecer un ambiente de salud integral en centros de trabajo y procurar mejores condiciones de seguridad, higiene y capacitación, el programa anunciado ayer pretende proveer a empleadores de herramientas que permitan enfrentar y resolver los casos de adicciones de sus trabajadores, sea de alcohol, tabaco o drogas ilícitas.

El acto, efectuado en Los Pinos, estuvo encabezado por Margarita Zavala, presidenta del DIF.