París, 9 de octubre. El ex jefe del Partido Socialista (PS) francés, François Hollande, lideraba hoy los resultados de la primera vuelta de las inéditas primarias, que movilizaron masivamente a la izquierda, y dentro de una semana disputará la segunda vuelta frente a Martine Aubry, con la mirada puesta en las elecciones presidenciales de 2012.

Al frente de los resultados, con 39 por ciento de los votos, escrutados los casi 2 millones de sufragios, Hollande, diputado y presidente regional de 57 años, se acercaba a su sueño de encarnar un presidente normal para Francia a partir de 2012.

Sonriente frente a una nube de fotógrafos y cámaras en la Maison de l’Amerique Latine, en el corazón de París, Hollande calificó estas primarias de históricas y se presentó como el candidato del cambio, llamando a la más amplia unidad en torno a su candidatura en la segunda vuelta del 16 de octubre, puesto que ninguno de los dos finalistas obtuvo más de 50 por ciento de los votos.

Ahora vamos hacia la segunda vuelta decisiva, porque permitirá al candidato asumir su responsabilidad de derrotar a la derecha y apartar a la extrema derecha de la carrera por la presidencia en 2012, sostuvo Hollande, quien nunca ejerció un cargo ministerial y a quien su adversaria socialista considera representante de una izquierda blanda.

El domingo por la noche, Martine Aubry, quien obtenía 31 por ciento de los votos, volvió a la carga: frente a una derecha dura, se necesita una izquierda fuerte para sacar a Francia de la crisis, afirmó la ex ministra de Trabajo de Lionel Jospin.

Jefa del PS desde 2008 hasta junio pasado y actual alcaldesa de Lille, Aubry, de 61 años, aseguró que los candidatos en estas primarias que marcarán la historia de la izquierda dieron “un adelanto del excelente ‘equipo de Francia’ que podremos poner en marcha en 2012”.

En un sorprendente tercer lugar, con 17 por ciento de los votos, el diputado Arnaud Montebourg, organizador de estas primarias, reunirá este lunes a su equipo para decidir a quién apoyará el próximo domingo, aunque muchos piensan que será a Aubry.

Unas 10 mil oficinas de votación funcionaron en escuelas, alcaldías y gimnasios de todos el país. Para participar en estas primarias, los votantes inscritos en los padrones pagaron un euro y firmar su adhesión a los valores de la izquierda.

El jueves los dos finalistas a la segunda vuelta participarán en un debate por televisión.

El elegido del próximo domingo será proclamado en una convención partidaria en noviembre, cuando arranque la campaña electoral por el Palacio del Elíseo, sede de la presidencia, que los socialistas quieren ganar en 2012, más de 30 años después del histórico triunfo de Francois Mitterrand.