París. Contener el calentamiento global por debajo de 2 grados centígrados requiere reducir las emisiones de bióxido de carbono, pero también generalizar las medidas de lucha contra la contaminación del aire (ozono y hollín), según un estudio del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente y la Organización Meteorológica Mundial. Una acción rápida contribuiría a limitar a corto plazo el aumento de las temperaturas. El carbono negro son partículas presentes en el hollín, emitidas por vehículos, incendios forestales y ciertas instalaciones industriales.