La Secretaría de Gobernación (SG) consideró que para evitar episodios como el ocurrido con el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Genaro García Luna, en torno a la medalla que recibió de Colombia sin autorización del Congreso, es necesario reglamentar la legislación para modificar y, eventualmente, suprimir este tipo de trámites, que en la jerga legislativa se conocen como corcholatazos.

“Desde nuestro punto de vista, es un tema que fue sobredimensionado (…) esas disposiciones sólo se aplican en México, Paraguay y en algunas monarquías europeas; los países normales no tienen ya esas cosas”, dijo el subsecretario de Enlace Legislativo de la SG, Rubén Alfonso Fernández Aceves.

Lo anterior, debido a las críticas y acusaciones contra García Luna por recibir un reconocimiento de la Policía Nacional de Colombia, entregado por el presidente de aquella nación.

El funcionario responsable de la relación y coordinación del Ejecutivo con el Legislativo, minimizó la confrontación que en días recientes han tenido miembros del gabinete –como el secretario del Trabajo, Javier Lozano– con legisladores. Son asuntos coyunturales que no afectan el trabajo del Congreso de la Unión, dijo en entrevista realizada en el Palacio de Covián.

Con la previsión de que eventualmente se apruebe la realización de un periodo extraordinario de sesiones, señaló que la discusión de ambos poderes se debe basar exclusivamente en lo que establece el Plan Nacional de Desarrollo y generar una agenda proactiva.

Entre los temas prioritarios del Ejecutivo se encuentra la reforma de seguridad nacional, con base en la cual se precisarían las facultades del Presidente de la República en esta materia.

En torno al caso García Luna, algunos legisladores de oposición comentaron que significa una flagrante violación a la Constitución, cuya consecuencia es el inicio de un juicio político e incluso la pérdida de la ciudadanía del funcionario.

La solicitud del secretario de Seguridad Pública fue entregada a la cancillería el 17 de mayo y ésta, a su vez, la envió a Gobernación para su entrega al Congreso. Sin embargo, el día de la condecoración todavía no se desahogaba el trámite en la Permanente.

El subsecretario restó importancia al hecho y subrayó que en toda la historia el Congreso jamás se ha negado a que algún servidor público sea condecorado.

Estamos frente a un mero trámite, porque “ya no estamos en el supuesto de que al recibir una medallita de ésas, el mexicano se someta a los poderes de Colombia.

“La Constitución no ha sido reformada, y lo que ocurrió es que no se procesó con los tiempos debidos para que la Comisión Permanente lo resolviera.