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Directora General: CARMEN LIRA SAADE Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER Domingo 24 de abril de 2011 Num: 842 |
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Bazar de asombros México, el país y sus miedos La revolución La narrativa mexicana: entre la violencia Erasmo: necedad Un vicio como otro Columnas: |
Germaine Gómez Haro Artistas oaxaqueños por la defensa ambiental Como es bien sabido, el estado de Oaxaca ha sido un ejemplo sin precedentes de los logros que la sociedad civil unida puede alcanzar en beneficio de su patrimonio cultural y natural, del bienestar social y de la denuncia de las injusticias y los abusos perpetrados por la corrupción gubernamental. En 1993, por iniciativa del artista Francisco Toledo, se constituyó el Patronato Pro Defensa y Conservación del Patrimonio Cultural y Natural de Oaxaca (PROOAX), integrado por pintores, escritores, historiadores, abogados, galeristas y otros miembros de la sociedad civil. Este organismo consiguió frenar numerosas iniciativas nefastas en distintos ámbitos de la sociedad y ha sido un ejemplo para las nuevas generaciones que, siguiendo la huella del aguerrido maestro Toledo, se han comprometido con los numerosos dilemas que aquejan su hermosa y admirada tierra. Recientemente se presentó en el Museo de los Pintores Oaxaqueños y en la Casa Lamm el proyecto titulado Sobreviviendo. Mánejese con cuidado. Mamíferos en peligro de extinción del estado de Oaxaca, que es el resultado de la unión de veintinueve artistas plásticos encabezados por el pintor y grabador oaxaqueño Juan Alcázar y un grupo de científicos preocupados por la dramática situación que sufren diversas especies endémicas de esa región considerada la de mayor diversidad de flora y fauna en nuestro país. Alcázar reunió a los artistas Alejandra Villegas, Alejandro Santiago, Alfredo Cardona, Álvaro Santiago, Arnulfo Aquino, Azteca de Gyves, Cecilio Sánchez, Efraín Morales, Emiliano López, Enrique Flores, Felipe de Jesús Morales, Fernando Aceves Humana, Fernando Andriacci, Guillermo Olguín, Ildefonso López, Israel Nazario, Israel Montes, Jorge López García, José Villalobos, Juan Gómez, Justina Fuentes, Lorena Montes, Marco Bustamante, Mariano Pineda Matus, Tomás Pineda Matus, Víctor Calderón y Silvia Castellanos, quienes realizaron una carpeta que contiene veintinueve espléndidos grabados que representan a las especies en peligro de extinción, cada uno acompañado de un texto a cargo de la zoóloga Avril Figueroa de León, en el que se describe al animal y se señalan su localización, sus rasgos, los motivos de su progresiva desaparición y su relación con las comunidades indígenas. Adicionalmente se editó un catálogo con las mismas características, el cual, junto con la comercialización de la carpeta de grabados, contribuirá a la divulgación del peligro inminente que supone la desaparición de estas especies. Las estampas creadas por los artistas a partir de fotografías del animal que les fue asignado son recreaciones libres, unas a color y otras en blanco y negro, y constituyen en su conjunto un fascinante compendium de esta fauna que atraviesa una situación dramática y cuya extinción significa un daño irreversible y de inestimadas consecuencias en el equilibrio bioambiental de la región.
En las presentaciones de la carpeta, el activista ecológico y colaborador de este diario, Iván Restrepo, resaltó la urgencia de atender dos de los problemas más preocupantes que aquejan a nuestra querida Oaxaca: la pobreza extrema y la destrucción despiadada de los bosques que afecta la naturaleza del agua y por consiguiente, desencadena la extinción de la biodiversidad. Es de vital relevancia llevar a cabo una labor de concientización de las comunidades indígenas en cuanto a la necesidad de conservar la naturaleza y su fauna, dado que en muchos casos desconocen los riesgos de la caza furtiva de algunos animales, como el ocelote, el leoncillo, el jaguar, el tigrillo o la nutria, cuyas pieles tienen una inmensa demanda en el mercado clandestino, u otras especies, como algunos murciélagos y roedores a los cuales se atribuyen falsamente ataques al ganado o la destrucción de los campos de cultivo. Es gratificante constatar que hay muchos artistas que se preocupan por que su creación tenga otro destino más allá de la comercialización. La concientización de la sociedad a través del arte y de la educación debería ser una de nuestras prioridades, con el objeto de buscar soluciones y poner fin a los aterradores trastornos que sufre nuestra sociedad. Enhorabuena a los proyectos loables como éste. |
