El grupo parlamentario del PRD en el Senado presentó una iniciativa para crear la Secretaría de Asuntos Indígenas, mediante la cual se deberá lograr el pleno reconocimiento de los derechos humanos, culturales y jurídicos de la población originaria y avanzar hacia una igualdad de oportunidades.

La propuesta perredista se turnó para su análisis a las comisiones de Gobernación y a la de Estudios Legislativos, Segunda. En la iniciativa se destaca que los pueblos indígenas viven en precarias condiciones y sufren múltiples problemas, como desnutrición, mortalidad por enfermedades comunes, analfabetismo y desconocimiento jurídico.

Por otra parte, la académica de la Escuela Nacional de Trabajo Social de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Kenya Sánchez, destacó que la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación es inoperante, al no contar con un reglamento que defina responsables, forma de operación, plazos, sanciones y las especificaciones para poder aplicarla.

Esta carencia del reglamento –pese a que la ley fue aprobada por unanimidad en el Congreso desde junio de 2003–, representa una enorme limitante, pues no hay una norma que obligue a las instituciones a emplearla. Hay lagunas abiertas, dijo la especialista.

Además, lamentó que no exista en el país un sistema nacional de indicadores o una base de datos que señale con precisión dónde se ubica la segregación en sus diferentes formas y expresiones. En estas condiciones, agregó, resulta complicado avanzar en su erradicación.

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), por su parte, demandó ayer que en conmemoración, este 21 de marzo, del Día Internacional para la Eliminación de la Discriminación Racial, se deben redoblar esfuerzos para evitar situaciones que impliquen exclusión, discriminación o rechazo por origen, color de piel, creencias, lengua o forma de vestir de la población indígena.

En México, hay 15.7 millones de indígenas, que padecen rechazo y discriminación, apunta la CNDH; ante ello, dijo, es necesario avanzar en la construcción de un país más justo y equitativo.

La CNDH precisó que las situaciones de marginación y desigualdad impiden el desarrollo social, económico y político de los indios, además de que constituyen una violación a sus derechos fundamentales.

Destacó la CNDH que es necesario mejorar la condición de vida de los indígenas mediante servicios de salud y educación que les ayuden a superar sus carencias, además de garantizarles acceso pleno al sistema de justicia.

De igual forma, el Movimiento Nacional por la Diversidad Cultural en México advirtió que en México el racismo, la discriminación racial, la xenofobia y otras formas de intolerancia causan aún afectaciones a personas indígenas, afrodescendientes o de origen extranjero,

Subrayó que esas conductas constituyen una negación de los propósitos de la Carta de las Naciones Unidas y de la Constitución.

En un comunicado de la UNAM, se indica que la investigadora Kenya Sánchez refiere que la discriminación, definida como el rechazo a las personas por creencia, religión, sexo, forma de pensar y preferencia sexual, se profundiza por condiciones generadas por el desempleo, falta de oportunidades educativas, delincuencia y violencia.

Recordó que la más reciente Encuesta Nacional sobre Percepción de las Formas de Discriminación (2005) demostró que en la región norte y centro del país, la población indígena padece mayores índices de rechazo.

Incluso, algunas colectividades negras de la costa de Guerrero y Oaxaca han sido marginadas por pueblos originarios con más peso numérico. Esto se relaciona con una lectura de pertenencia y una cuestión de poder.