Guadalajara, Jal., 9 de diciembre. El gobernador de Jalisco, Emilio González Márquez, contestó a los rectores de ocho universidades públicas que el miércoles se reunieron en esta capital para exigirle que entregue 701 millones de pesos que adeuda a la Universidad de Guadalajara (UdeG) que la escasez financiera en esa casa de estudios se debe a la mafia encabezada por Raúl Padilla López, que la tiene secuestrada y se ha robado el dinero.

Mientras, este jueves se realizó otra manifestación estudiantil ante Casa Jalisco –residencia oficial del gobernador– para demandar la liberación de los fondos. Los jóvenes llevaron un burro al que bautizaron como Burrilio y otros como Goobber.

“Yo les preguntaría a los señores rectores: ¿cuánto dinero aportan los gobiernos de sus estados a sus universidades? Para empezar, a la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México), el Distrito Federal no le aporta nada, ni el estado de México, cero pesos le aportan. Todo es el gobierno federal.

En cambio nosotros, la mayoría de la inversión es por parte del gobierno del estado. Entonces, ¿qué hay detrás de todo esto? Un movimiento político, un movimiento de gente que busca más dinero porque el que le dio el pueblo ya se lo acabó y no puede demostrar en qué lo ha gastado, dijo entrevistado durante una gira por Baja California, adonde acudió a promover los Juegos Panamericanos que se realizarán en Guadalajara en octubre próximo.

Señaló que la UdeG recibió este año 6 mil 500 millones de pesos, “una cantidad increíble, y dicen que no tienen dinero para comprar gises y pizarrones cuando el presupuesto que la casa de estudios presentó el año pasado fue aprobado por el Congreso, incluyendo aguinaldos y sueldos de profesores. No hay justificación para que ahora digan que tampoco tienen para eso. La pregunta es: ¿quién se robó ese dinero, puesto que todo se ha entregado?, añadió.

El grupo político que controla la UdeG invierte en negocios, no en maestros; invierte en representaciones teatrales, trae artistas de fama internacional y hace negocios con ellos; el dinero del pueblo no lo están invirtiendo en más escuelas, en más salones, o en pagarle bien a los maestros; lo están invirtiendo en negocios que manejan además de manera turbia. Tienen agencias de viajes, centros de espectáculos, empresas inmobiliarias, o sea, tienen todo menos lo que está vinculado a la educación, sostuvo.

El rector sustituto de la UdeG, Marco Antonio Cortés Guardado, consideró la respuesta del gobernador a los ocho rectores digna de un estudiante de preparatoria y lo retó a presentar pruebas de sus dichos.

Ponerse al nivel de un joven de preparatoria para responder los reclamos de una de las instituciones públicas más importantes del país, debería hacer dudar mucho de la capacidad que tiene el licenciado Emilio González Márquez como gobernante, dijo.

Mientras, unos 500 alumnos y profesores de la UdeG acudieron a Casa Jalisco para seguir presionando por la entrega de los recursos adeudados. La novedad fue que llegaron con un burro ataviado con sombrero, mascada y billetes de juguete, arreado por un muchacho caracterizado como Adolfo Hitler y con una cartulina que decía Ferguz, en alusión al secretario general de Gobierno, Fernando Guzmán Pérez Peláez, panista al igual que Emilio González y presunto miembro del grupo de ultraderecha El Yunque.