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El talibán está seguro que sobrevivirá a EU y aliados, afirma ante un comité del Senado

Habrá una escalada de violencia en Afganistán, prevé el general David Petraeus
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El jefe militar comparece en el Senado, que se vaticina lo confirmará en el mando en el país invadido. Anunció durante la audiencia que se mantiene el calendario de retiro gradual de soldados en julio de 2011Foto Reuters
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Pacifistas se manifiestan contra la guerra mientras el general David Petraeus testifica ante el SenadoFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Miércoles 30 de junio de 2010, p. 33

Washington, 29 de junio. El general designado para asumir el mando de las fuerzas de Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Afganistán dijo hoy que en la invadida nación se empiezan a ver avances en ciertos ámbitos, pero preparó a los legisladores para una escalada de violencia en el conflicto, al pronosticar duros combates por venir y reducir las esperanzas de un rápido cambio después de nueve años de guerra.

La confirmación del Senado parecía segura para el general David Petraeus, quien se convirtió en una de las mayores estrellas militares de Estados Unidos después de ayudar a revertir la tendencia negativa de la guerra en Irak.

El presidente estadunidense, Barack Obama, despidió la semana pasada al anterior comandante en Afganistán, el general Stanley McChrystal, después de que él y sus colaboradores formularon polémicas declaraciones con críticas al presidente y otros altos asesores civiles en un artículo en la revista Rolling Stone.

El mandatario demócrata nombró al general Petraeus para hacerse cargo de los esfuerzos en el conflicto en Afganistán, invadido a finales de 2001, en represalia por el apoyo brindado por el talibán a Osama Bin Laden y su red Al Qaeda, grupo al que se acusa de ser responsable de los ataques contra Washington y Nueva York el 11 de septiembre de ese año.

La guerra en Afganistán se ha vuelto impopular entre la ciudadanía estadunidense, pero Petraeus utilizó la audiencia de confirmación de hoy para disminuir cualquier esperanza de un cambio rápido en el curso de la guerra, durante una sesión en la que activistas de la organización Código Rosa protestaron contra la guerra.

El hasta ahora jefe del Comando Central estadunidense en la región reconoció las limitaciones en el entrenamiento de fuerzas afganas y en crear un gobierno local frente a lo que llamó una insurgencia de fuerza industrial.

El militar agregó, en declaraciones preparadas para el Comité de Servicios Armados del Senado, que sentía que los combates fuertes seguirán y que incluso podrían volverse más intensos durante los próximos meses.

A medida que eliminemos los escondites seguros del enemigo y reduzcamos su libertad de acción, los insurgentes talibanes devolverán los ataques, indicó.

Petraeus dijo que la situación de seguridad sigue siendo delicada y que la insurgencia talibán es capaz de recuperarse y está segura de que sobrevivirá a Estados Unidos y sus aliados.

En su testimonio preparado, Petraeus aseveró que revisará cómo se estaba librando la guerra, incluyendo las reglas de compromiso que algunos dicen ponen a las tropas estadunidenses en un riesgo innecesario para proteger a los civiles afganos, una medida que podría ser polémica.

Estoy profundamente al tanto de las preocupaciones de algunos de nuestros soldados en terreno sobre la aplicación de las reglas de compromiso y la directiva táctica. Deben saber que revisaré fuertemente este tema, indicó.

Aseguró que es posible aplicar cambios significativos, dependiendo de una revisión de la Casa Blanca sobre la estrategia del conflicto en diciembre.

Petraeus aclaró que apoya la estrategia bélica de Obama, incluyendo el objetivo de comenzar una transición para entregar la autoridad a las fuerzas de seguridad afganas y un retiro gradual de soldados en julio de 2011.

Destacó que cualquier retiro de tropas se basará en las condiciones de seguridad en terreno y limitado al aumento de 30 mil efectivos que Obama acordó enviar en diciembre próximo, como parte de una estrategia revisada que puso el foco en asegurar centros poblados, entre ellos el corazón talibán en Kandahar.

El general reconoció la tarea enormemente desafiante de aumentar las fuerzas de seguridad afganas para asumir la tarea que en la actualidad realizan las tropas estadunidenses y de la OTAN.

Ayudar a entrenar y equipar las fuerzas nacionales locales en medio de una insurgencia es similar a construir una aeronave avanzada mientras está en vuelo, mientras es diseñada y mientras recibe disparos. No es para nada fácil, destacó el militar.

Senadores de ambos partidos definieron a Petraeus como soldado excelente con excelentes cualidades de mando, y la confirmación del pleno del Senado para el cargo de Petraeus parecía asegurada para este fin de semana.

Obama cuenta con el general para que tenga en Afganistán el mismo éxito que tuvo en revertir el curso de la guerra Irak.

Sobre esto, señaló que no se debe asumir que aquello que funcionó en Irak tendrá el mismo efecto en Afganistán, al exponer que los progresos eran más lentos de lo esperado en el bastión sureño de los talibanes y que la tarea de entrenar a las fuerzas de seguridad locales para que tomen el control de seguridad sigue siendo un desafío monumental.

Tengo la impresión de que los duros enfrentamientos continuarán. De hecho, podrían agudizarse en los próximos meses, insistió Petraeus al comité.

La guerra en Afganistán se ha extendido al vecino Pakistán, donde el talibán tiene presencia. Cuatro presuntos rebeldes islamitas murieron por misiles disparados por un avión teleguiado estadunidense en las zonas tribales del noroeste paquistaní, donde la CIA ataca regularmente bases de Al Qaeda y el talibán, reportaron mandos militares paquistaníes.