En 2008 la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) cumplió las metas de modernizar y simplificar el quehacer educativo y hacer que la administración fuese más transparente y eficiente; además de garantizar la rendición de cuentas, determinó la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

La Unidad de Evaluación y Control de la Cámara de Diputados refiere que en aquellos programas que buscan promover la educación integral en todo el sistema, como ampliación de la cobertura, equidad, calidad y pertinencia del nivel superior, la auditoría de desempeño que se practicó a la UNAM es un ejemplo.

Durante el periodo 2000-2008, la UNAM incrementó su matrícula en una tasa promedio anual de 2.8 por ciento. En el mismo periodo, en las unidades académicas se mejoraron los indicadores educativos: el índice de egresados aumentó de 49.2 a 55.5 por ciento; el de titulación creció a tasa anual de 6.4; eficiencia terminal pasó de 29.4 a 37.8, y cayó el índice de reprobación de 22.7 a 18.7 por ciento.

Los planes de estudio de 34 carreras (equivalentes a 82.9 por ciento) fueron diagnosticados dentro del plazo normativo de seis años, y 38 de 39 programas (97.4 por ciento) fueron acreditados por los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior o por otros organismos reconocidos por el Consejo para la Acreditación de la Educación Superior.

En 2008, el personal académico de la UNAM que pertenece al Sistema Nacional de Investigadores se incrementó 3 por ciento respecto de 2007. En conjunto, las unidades de investigación de la muestra concluyeron 50 proyectos (114 por ciento de la meta fijada); 27 de ellos (54 por ciento) acerca de problemas nacionales, y 23 (46 por ciento) sobre áreas del conocimiento de frontera.

Ese mismo año las actividades de difusión cultural disminuyeron 29.7 por ciento respecto de 2001; la asistencia a las actividades en esta materia bajó 0.2, pero la asistencia promedio por acto aumentó 41.9 por ciento.