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Directora General: CARMEN LIRA SAADE Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER Domingo 10 de enero de 2010 Num: 775 |
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Bazar de asombros Economía y cultura Negación a pesar de la evidencia Alentar la economía cultural Triángulo de voces Medios sin mercados Hacia un sistema económico del sector cultural Ser vendedores de cultura ¿Públicos o consumidores? La escritura fronteriza Columnas: |
Alentar la economía culturalHéctor GarayA mitad de 2009, en la Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco, se conformó el Grupo de Reflexión sobre Economía y Cultura*, con el propósito de impulsar el reconocimiento de la economía cultural como parte sustantiva del desarrollo del país. Para avanzar en este propósito, el primer escenario de reflexión ha sido que, si bien la discusión y apuntalamiento de una política cultural seguirá siendo necesaria, llegó la hora de trazar, por un lado, una política económica para el sector cultural, y por otro, arribar al diseño de un sistema económico del sector cultural. Los diversos especialistas que forman el grupo nos reunimos de manera periódica para pensar en una nueva realidad de las políticas culturales, sociales y económicas. Una de las aportaciones iniciales es el entendimiento del “sector cultural” de manera más amplia. Con frecuencia, al hablar de este sector se piensa sólo en el Conaculta. En el grupo alentamos una visión integral al señalar otros “subsectores”. Además del aparato de la administración pública en materia de difusión cultural en los diferentes ámbitos de gobierno, hay que considerar el subsector de las micro, pequeñas y medianas empresas culturales; el subsector de organismos asistenciales y de cooperación internacional (asociaciones civiles, fundaciones, ONG) y el subsector de las grandes empresas e industrias culturales. La comprensión del potencial económico de todos estos subsectores, su impulso, a través de políticas transversales y su integración en estrategias que los hagan actuar de manera conjunta, propiciaría el fortalecimiento de una economía y una difusión de la cultura que apoyen el desarrollo sustentable. Sin embargo, las acciones en este terreno pasan por contar con mayores recursos para generar empleos y productividad. Pero siempre y cuando vaya atado al redimensionamiento del aparato administrativo cultural que evite las duplicidades e ineficiencias. Es necesaria la revisión de la pertinencia y sentido del aparato gubernamental. Las decisiones y debates en economía cultural se fundamentan en información confiable. En este sentido planteamos el seguimiento de estudios, estadísticas e indicadores sobre prácticas y consumos culturales, empleo, financiamiento a la cultura y la aportación del sector al PIB. Crear la Cuenta Satélite del sector en el INEGI es impostergable. También a corto plazo el grupo se propone la creación de un Observatorio de Economía y Cultura, brazo operativo, generador de indicadores y análisis. Algunas de estas consideraciones han sido incluidas en el documento titulado: “El sector cultural en México. Algunos pronunciamientos para alentar la economía cultural.” Un instrumento de análisis y propuestas de acceso público que está ya en manos de diferentes agentes sociales: el poder legislativo y ejecutivo, grupos empresariales, agrupaciones culturales. *Integrantes: René Avilés Fabila, Rafael Campos Sánchez, Elena Catalán, David Dávila, Héctor Garay, Carlos García de Alba, Valentina Gatti, Federico González Compeán, Alejandro González Hernández, Carlos Madrid Varela, Antonio Mier Hughes, Alejandro Ordorica Saavedra, Jorge Pantoja, Ricardo Rojo y Leobardo Sarabia Quiroz , coordinados por Eduardo Cruz Vázquez. |
