Sociedad y Justicia
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Equitativas, sólo las leyes que rechazan experimentos genéticos

Se lanza Benedicto XVI contra el aborto y el matrimonio homosexual
 
Periódico La Jornada
Jueves 17 de diciembre de 2009, p. 39

Ciudad del Vaticano, 16 de diciembre. El papa Benedicto XVI lanzó este miércoles un duro ataque contra el aborto, los experimentos genéticos y el matrimonio entre personas del mismo sexo, durante la audiencia general de los miércoles en el Vaticano.

Son conformes a la equidad sólo aquellas leyes que tutelan el carácter sagrado de la vida humana y rechazan la licitud del aborto, la eutanasia y los experimentos genéticos descontrolados, dijo el Papa ante cerca de 9 mil personas que asistieron a la audiencia, realizada en la sala Pablo VI.

Laicidad

Durante su intervención, el pontífice aseguró que también son conformes a la equidad “aquellas leyes que respetan la dignidad del matrimonio entre el hombre y la mujer, que se inspiran en una correcta laicidad del Estado –laicidad que lleva aparejada siempre la salvaguarda de la libertad religiosa– y que defienden la subsidiariedad y la solidaridad en los ámbitos nacional e internacional”, agregó.

Las palabras del Papa, que resumieron la posición oficial de la Iglesia católica sobre temas morales candentes, estuvieron dirigida sobre todo al mundo político, al que volvió a pedir que “no se someta a la dictadura del relativismo.

La dictadura del relativismo, como recordaba hace algunos años, no reconoce nada como definitivo y considera última medida sólo el propio yo y sus deseos, recalcó.

En nuestra época, sobre todo en algunos países, asistimos a una separación preocupante entre la razón, que tiene la tarea de descubrir los valores éticos ligados a la dignidad de la persona humana, y la libertad, que tiene la responsabilidad de acogerlos y promoverlos, afirmó.

El Papa hizo este llamado durante la tradicional catequesis del miércoles, dedicada a las enseñanzas del filósofo y teólogo del siglo XII John de Salisbury, autor de el Metaloghicón (En defensa de la lógica) y el Polycráticus (El hombre que gobierna).

La Iglesia católica condena duramente la tendencia de la sociedad a privilegiar otras formas de convivencia y condena la legalización en varios países del matrimonio entre homosexuales, así como la eutanasia y la manipulación genética.