Cultura
Ver día anteriorSábado 17 de octubre de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Convirtió un mural de su autoría en varios cuadros y los exhibe en la Galería Pecanins

Héctor de Anda fragmenta su discurso de la memoria

La muestra Deconstrucción parte de la empalizada de la avenida Gabriel Mancera 724

El artista amalgama las experiencias que marcan su evolución estética, dice a La Jornada

Foto
Héctor de Anda con algunos de sus cuadros que muestra en la galería de Durango 186, colonia RomaFoto Luis Humberto González
 
Periódico La Jornada
Sábado 17 de octubre de 2009, p. 3

El artista Héctor de Anda convirtió su mural urbano, hecho en 2008 para el Proyecto de Gabriel Mancera, en los cuadros que con el título Deconstrucción se muestran hoy a las 12:30 horas en la Galería Pecanins.

De Anda se sintió atraído por la empalizada de la calle Gabriel Mancera 724, de 3.5 metros de altura y 24 metros de largo, dividido en dos segmentos, la cual, con el consentimiento de la constructora, convirtió en una suerte de nuevo mural del siglo XXI.

Desmontada la valla de pequeñas tablas de madera, clavadas unas encima de otras, pintadas con acrílicos, esmaltes, resinas e impermeabilizantes, ésta quedó bajo el resguardo del artista, quien empezó a rearmarla mediante la pintura, el dibujo y el collage para cumplir con una idea original: reducir el gran formato a la mínima expresión, pero enriqueciéndolo plásticamente.

Códigos secretos y numerología

En los cuadros de la exposición De Anda toma “muchos elementos de arquitectura gráfica del catalán Ricardo Bofill, fotografiado por Helmut Newton. Hay varios paralelos, porque Bofill en los años 40 y 50, así como Newton en los 70, tienen mucho que ver conmigo.

Nazco en los años 50, me desarrollo y vivo plenamente en los 70: me voy a Europa, descubro muchas cosas que me marcan para siempre. Todo esto quise amalgamarlo y meterlo en este trabajo con una visión actual.

Las obras, anota, incluyen códigos secretos que equivalen a “un lenguaje y una numerología que manejo siempre con cosas personales, historia, referencias. Los números no están puestos para que se vean bien, sino porque dicen algo de mí.

“La tarea del otro sería decodificar y encontrar el sentido. Cada cuadro es finalmente como una historia que en su conjunto resume hasta aquí donde he vivido que es otra constante.

No creo en el mañana. Siempre pienso que hoy es mi último día, así lo vivo y me gusta. No me creo conflictos, al contrario valoro lo que tengo y he hecho.

–Eso suena nostálgico.

–Acuérdate que siempre trabajo con la idea de la memoria, la historia, todo lo que he vivido, todos los recuerdos y esa gran constante de los territorios mentales. Entonces, siguiendo este discurso de la memoria, pues lo llevo ahora en esta parte en la que todo se ve inclusive fragmentado.

Aunque trabajo con la memoria, no vivo del pasado; al contrario, todo esto me nutre.

Respecto del reducido formato de la mayoría de los cuadros, en comparación con el mural original, el entrevistado considera que así se vuelven más íntimos y obligan al espectador a adentrarse en las texturas, las formas y el colorido de la obra; que no la sienta lejana.

Con esa exposición, De Anda concluye el trabajo con el mural del Proyecto de Gabriel Mancera. “Siempre estoy abierto a que me sorprenda la vida, lo visual. Entonces, entre lo visual y lo mental siempre encuentro un punto de coincidencia y eso me da la pauta para hacer lo nuevo.

Trato de no perderme, de dejarme ser, de dejar ir lo que voy viendo y viviendo, e ir en armonía con eso. No me creo conflictos realmente para trabajar. Soy un poco como el río.

Entre sus próximos proyectos, Héctor de Anda participará con un video en la reinauguración del Museo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. También en noviembre tomará parte en el programa Arte-sano entre artistas, en el Museo de Artes Populares, en el cual un artista y un artesano trabajan de manera conjunta la misma obra.