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Emite la OEA declaración de condena por expulsión de funcionarios

Brasil no acata ultimátum de golpistas ni reconoce a usurpadores del poder: Lula
 
Periódico La Jornada
Lunes 28 de septiembre de 2009, p. 28

Porlamar, Venezuela, 27 de septiembre. Brasil rechazó hoy el ultimátum del gobierno de facto de Honduras para que defina la situación del presidente constitucional Manuel Zelaya, quien se encuentra en calidad de huésped en la embajada brasileña en Tegucigalpa, en una escalada de las tensiones diplomáticas, en la cual la Organización de Estados Americanos (OEA) respondió con una declaración de condena a la decisión de los golpistas de expulsar a funcionarios del organismo de la capital hondureña a San José, Costa Rica, este domingo.

El gobierno brasileño no acata ultimátum de golpistas ni reconoce como gobierno interino a usurpadores del poder, afirmó el presidente Luiz Inacio Lula da Silva en una rueda de prensa ofrecida en la cumbre Sudamérica-África.

Lula dijo que en la situación actual –con la embajada sitiada por militares y las relaciones bilaterales a nivel de encargado de negocios– Brasil sólo acataría una solicitud de negociación con Honduras si se hace por medio de la Organización de Naciones Unidas o por la Organización de Estados Americanos.

El alojamiento dado a Zelaya el lunes pasado, que ha generado críticas de la derecha brasileña a Lula, llevó al gobierno de facto hondureño a pedir a Brasilia que impida al mandatario constitucional hacer llamados a la desobediencia civil.

A su vez, el canciller brasileño Celso Amorim reconoció que –como informó a la prensa brasileña una funcionaria de la legación en Tegucigalpa– debió comunicarse con Zelaya para que cese el uso político de la embajada y para sugerir que las 60 personas alojadas paren de insultar a los soldados que rodean el inmueble.

Tras el impedimento a una comitiva de la OEA de llegar hasta la legación brasileña este domingo y su posterior expulsión de Honduras, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, consideró incomprensible la decisión del gobierno de facto, puesto que los funcionarios del organismo viajaron a Tegucigalpa para preparar la próxima visita de una misión de cancilleres que evaluará la situación en el país centroamericano.