Luego de conquistar el séptimo lugar en el Mundial de futbol de calle, los integrantes del equipo mexicano se convertirán en agentes de cambio y al regresar a su comunidad tiene la tarea de hablar de la experiencia que han vivido y comenzar a promover el deporte. Jalarse a los chavos en lugar de que estén echándose sus alcoholes, que comiencen a convencerlos de realizar una actividad física.

Lo anterior lo informó Daniel Copto, técnico de la escuadra, porque no sólo recibieron preparación futbolística, sino también integral. Trabajamos dinámica y terapia de grupo, así como talleres de vida. Al final lo que tratamos, ése es el proyecto, es conformar mejores seres humanos.

Las cuentas que trajeron ayer de Milán, por lo pronto, son tres derrotas en 13 partidos. La más dolorosa fue ante Brasil, ya que nos sacó de las semifinales.

El técnico consideró que eran mucho mejores que los brasileños, pero nos estuvieron haciendo cochinadas con la anuencia del árbitro y los mexicanos perdieron la cabeza y el encuentro.

También, apuntó Copto, se presionaron porque antes del duelo el técnico nacional Javier Aguirre habló con los jugadores y pensaron que los ojos del país estaban puestos en ellos.