Cada nueva generación hace una lectura propia de los clásicos y de los autores vivos consagrados de su época. Un grupo de ensayistas jóvenes, menores de 35 años, ha hecho su propia lectura de Sergio Pitol, uno de los escritores vivos más importantes de las letras hispanoamericanas.

Esa lectura ha quedado plasmada en el libro Líneas de sombra: ensayos sobre Sergio Pitol, coordinado por José Homero y publicado por el Fondo Editorial Tierra Adentro, del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.

El volumen fue presentado la noche del miércoles, en la sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes, donde Homero dijo que, por un lado, la antología muestra una especie de instantánea de una generación y corrobora que el ensayo escrito por jóvenes es uno de los géneros que con más vitalidad se ejerce actualmente en México.

Como viene haciendo Tierra Adentro en relación con otros autores vivos consagrados, la idea fue someter la obra de Pitol al escrutinio de autores jóvenes, con diversos intereses y afinidades.

Nada de culto a la personalidad

Armando González Torres sostuvo que la lectura de autores consagrados por lectores jóvenes pone a prueba la durabilidad de su influencia, la vigencia de sus reflejos, la capacidad de entusiasmar.

Consideró que la selección realizada por José Homero es atinada y armónica. Al mismo tiempo, resulta una muestra variada de formas de lectura, que van desde la aproximación más íntima y creativa hasta los enfoques más cercanos a la crítica literaria académica o formal.

Se trata, en todo caso, de un libro que ilumina diversas zonas literarias y vitales de un autor aún inagotado.

Por lo demás, concluyó González Torres, veo con agrado que está ausente el culto a la personalidad que suele invadir la visión de otros autores consagrados.

Son nueve los ensayistas incluidos en Línea de sombra: Vicente Alfonso (Torreón, 1978); Marco Antúnez (Jalapa, 1984); Elisa Corona Aguilar (DF, 1981); Alejandro García Abreu (DF, 1984); Karla Olvera (Pachuca, 1981); Rafael Toriz (Jalapa, 1983); Ignacio M. Sánchez Prado (DF, 1979); Édgar Valencia (Ciudad Victoria, 1975) y Magali Velasco Vargas (Jalapa, 1975).

Los ensayos están divididos en tres secciones: Luz, Sombra y Línea de sombra.

El libro también fue analizado favorablemente por el escritor Mario Bellatín y comentado por Ignacio M. Sánchez Prado, uno de los autores participantes en Línea de sombra.