Opinión
Ver día anteriorDomingo 31 de mayo de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Niños

En el teatro El Granero, Lágrimas de agua dulce

Historia para reflexionar sobre la discriminación

L

ágrimas de agua dulce de Jaime Chabaud es un espectáculo unipersonal con Ana Zavala que, bajo la dirección de Perla Szuchmacher, se presenta en el teatro Javier Rojas –mejor conocido como El granero– del Centro Cultural del Bosque. Refleja la historia de Sofía, una niña que posee una cualidad muy diferente a los demás, por lo que sufrirá y no será tratada como cualquier otro niño. Llora con lágrimas de agua dulce.

En el pueblo de Icuiricui, donde vive Sofía, la gente no entiende porqué de sus ojos salen lágrimas así.

Ello basta para que la vean rara, porque la gente normal llora lágrimas de agua salada, por lo tanto es considerada fenómeno y nadie se le acerca, sólo su abuela y un amiguito de esos que todos llegamos a tener.

El pueblo sufrirá por una gran sequía, los árboles se secarán, los animales morirán y la sed será inaguantable. Es aquí es donde la historia se vuelve triste.

Perla Szuchmacher tiene aciertos en la dirección, sobre todo al ayudar a que Ana encuentre los tonos, las pausas y las tensiones dramáticas. Sólo creo que por las características del teatro Perla no adapta el diseño espacial y provoca que se sienta un poco arrinconada.

En tanto, el trabajo que realiza Ana Zavala, con las interpretaciones de los diferentes personajes, es valioso para darle el carácter que pide la historia.

Foto
Cartel de la obra de Jaime Chabaud, que se presenta en el teatro El Granero

Mención aparte merece el quehacer de Jaime Chabaud, pues como inventor de historias, desarrollador de personajes, elaborador de diálogos sobrios y estupendo creador de atmósferas ha llegado a ser uno de los autores más representativos de la dramaturgia nacional.

En esta historia logra un equilibrio perfecto entre lo emocional y lo social que hace que el espectador se identifique racionalmente con los personajes que representan el bien. Con sencillez, nos muestra la maldad personal y colectiva de que puede ser capaz el ser humano mediante la discriminación, la ambición y el poder.

La puesta en escena cuenta con el acierto lumínico de Matías Gorlero, quien poco a poco se consolida en la construcción de atmósferas dramáticas de gran alcance.

Lágrimas de agua dulce es una historia para niños que los grandes deben ver para reflexionar un poco sobre la discriminación y los mecanismos del poder. Es una obra que se recomienda sola. Si quiere llevar a sus hijos a que disfruten de un buen trabajo artístico, no dude y asista sábado o domingo a las 12:30 horas al teatro Javier Rojas del Centro Cultural del Bosque. Reforma y Campo Marte (Metro Auditorio). Entrada 70 pesos.