La Habana, 18 de mayo. Mario Benedetti estuvo vinculado a la Casa de las Américas de Cuba, en la que fundó y dirigió durante cuatro años el Centro de Investigaciones Literarias. También fue integrante del consejo y activo colaborador de la revista de la institución, que hoy deploró la muerte del escritor uruguayo, al recordarlo como autor de una obra vasta y diversa y una de las más leídas de la literatura latinoamericana de la segunda mitad del siglo XX.

En la obra de Benedetti han encontrado lugar no sólo esa poesía y narrativa que han cautivado a millones de lectores, sino también el ensayo, el teatro, la crítica y el periodismo, recordó en un primer comentario la Casa, que prepara un homenaje al poeta, este martes, a la misma hora en la que se efectuará el sepelio en Montevideo.

La institución evocó a un Benedetti cautivante, incisivo, polemista, con capacidad de atraer a multitudes que se agolpaban para escucharlo adonde quiera que llevaba sus versos, y al mismo tiempo de generar encendidas discusiones intelectuales y políticas.

Al irrumpir la dictadura militar en Uruguay, Benedetti pasó parte de su exilio en Cuba. La noticia de su muerte nos deja consternados, añadió la nota de la Casa, evocando uno de los más célebres poemas políticos del escritor, una elegía a la muerte del Che Guevara (Aquí estamos, consternados, rabiosos).

El diario oficial Granma lo recordó como uno de los más prolíferos integrantes de la denominada Generación del 45, así como un virtuoso de las letras, que cautivó al calor de sus textos vigorosos, penetrantes y sensibles que le hacen figurar entre los grandes de la literatura iberoamericana.

Ambos comentarios recordaron la afinidad política de Benedetti. Por su apoyo a Cuba fue acosado, sin que cejara un momento su apoyo a una revolución que consideraba propia, señaló Casa de las Américas.