Política
Ver día anteriorMiércoles 29 de abril de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Cuentan con la secuencia genética del germen; se acelerará el estudio de muestras

Especialistas locales y foráneos analizan el virus en laboratorio de bioseguridad
 
Periódico La Jornada
Miércoles 29 de abril de 2009, p. 8

Los laboratorios de bioseguridad nivel 3 están concebidos para trabajar con microorganismos que representan un riesgo individual elevado y un riesgo poblacional bajo. Por sus características de seguridad, son útiles para el estudio de agentes patógenos que suelen causar enfermedades humanas o animales graves, de acuerdo con las directrices que ha emitido la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En México existen dos laboratorios de este tipo, según ha informado la Secretaría de Salud (Ssa), en uno de los cuales, ubicado en el Instituto Nacional de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (INDRE), ya se realiza el estudio respectivo sobre el nuevo virus de influenza responsable de la epidemia que ha afectado a más de 2 mil personas en el país.

Por falta de insumos para generar aquí el resultado de las muestras de exudado faringeo de los pacientes, la Ssa envió 23 muestras a laboratorios de Estados Unidos y Canadá, en 20 de las cuales se comprobó la presencia de un nuevo virus, el cual tiene un componente de la influenza porcina.

Desde el pasado sábado trabajan en el laboratorio de bioseguridad del INDRE, dos especialistas de Estados Unidos y una de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para apoyar a los científicos mexicanos. De entrada, los extranjeros trajeron a México la secuencia genética (ADN) del virus de influenza, con la que en cuestión de horas es posible conocer el tipo de cepa de que se trata, en particular si tiene el componente de la infección que también ataca a los cerdos y que el pasado jueves se detectó que, asimismo, está presente en el virus que infecta a las personas.

Fuentes consultadas por La Jornada comentaron que con ese material se incrementa de manera sustancial la capacidad de análisis del laboratorio de bioseguridad mexicano.

Sin embargo, desde ya, existe una sobresaturación del trabajo, al grado, dijeron, que el INDRE solicitará que sólo se le envíen las muestras de pacientes, cuya sintomatología se aproxime más a las características de la influenza porcina.

De acuerdo con los lineamientos de la OMS para la instalación de laboratorios de bioseguridad, emitidos en 2005, los del nivel 3 deben estar separados de las zonas del edificio por donde se puede circular sin restricciones, contar con puertas de acceso de cierre automático y disponer de un mecanismo de interbloqueo, a fin de que sólo una de ellas esté abierta en cada avance.

Entre otras características que debe reunir el laboratorio está el de las superficies de las paredes, suelos y techos, que deben ser impermeables y fáciles de limpiar.

Además, los sistemas de conducción de aire deben estar construidos de manera que se pueda realizar la descontaminación con gases; las ventanas tienen que estar cerradas herméticamente y contar con cristales resistentes a la rotura.

Otra medida que garantiza la desinfección del lugar es la existencia de una cámara de seguridad biológica y la instalación de un lavabo que no necesite ser accionado con la mano, en todas las puertas de salida del laboratorio.

El personal que se desempeña en el laboratorio de bioseguridad nivel 3 está adiestrado en el manejo de técnicas microbiológicas apropiadas.