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Aves inmutables en el Pacífico: ángeles de Guadalupe Mario Guerrero Madriles
Ave que no requiere de brújula ni de mapa al sobrevolar los océanos, extraordinario sentimiento de pertenecer a una tierra a pesar de vivir en la inmensidad del mar. Los albatros son las aves más grandes del océano con gran capacidad de vuelo y aterrizajes graciosos. El albatros nombra a colegios, empresas, clubes deportivos, fraccionamientos y embarcaciones, buscando transmitir grandeza y sentido único. En México, existen nidos de albatros de Laysan ( Phoebastria immutabilis ) en las islas Benedicto, Clarión y Guadalupe (la colonia más importante), donde se concentra menos del cinco por ciento de su población. Noventa por ciento anida en isla Laysan, al noroeste de Hawai y el otro 5 por ciento en islas niponas. Se reproducen a los ocho o nueve años. Luego de haber sobrevolado el océano, en noviembre y diciembre regresan a las islas donde nacieron y buscan a su pareja de toda la vida en un elegante cortejo. En los despliegues frente a frente, elevan la cabeza al cielo haciendo chistidos, para luego verse de frente, abrir y cerrar sus picos tan rápido que suenan. Por último ocultan su cabeza debajo del ala.
En diciembre, los padres comienzan la incubación de un solo huevo durante un mes. Lo hacen de forma alterna: uno busca alimento mientras el otro puede durar 15 días soportando las inclemencias del tiempo. Antes de la eclosión, el pollo emite sonidos, los padres acercan sus cabezas al huevo, lo miran fijamente y emiten sonidos agudos. El pollo rompe su cascarón. La carrera de supervivencia comienza. Los padres buscan alimento relevándose: peces, calamares y carroña de mamíferos marinos, dando al pollo un aceite energético. La cría necesita calor y protección de sol y viento. Los padres empiezan a volar alrededor de isla Guadalupe, luego exploran la corriente de California en las costas californianas, continúan hasta las costas de Canadá. Por último buscan alimento en las costas de Alaska, regresando de un viaje de 15 días. Imaginen, los polluelos en sus últimos días en la isla piden una cena de salmón fresco. Los adultos dejan Guadalupe en agosto para recorrer el Pacífico norte, alimentándose en la corriente de California de Estados Unidos y México, cerca de las islas Hawai, Alaska y Japón. Por su afición a los peces, calamares y carroña, siguen botes pesqueros buscando desechos y carnada en los anzuelos: al buscar la carnada, quedan atrapados y se hunden juntos.
De las 22 especies de albatros que existen en el mundo, 19 se encuentran gravemente amenazadas de extinción. Otra amenaza es la introducción de animales a las islas, donde depredan huevos, pollos y adultos, todos indefensos ante los invasores. Inmutables ante temporales y malas condiciones, los albatros surcan vientos para recorrer medio mundo. Son parte de la riqueza natural de nuestro país, pero la ignorancia de su existencia dificulta su protección. ¿Cómo conservarlos y apreciarlos si los confundimos con gaviotas? Ese desconocimiento no justifica que no se cuente y se aumente la información científica que nos permita comprender las relaciones que existen entre mar, viento y las aves marinas de nuestro planeta. |
