Usted está aquí: miércoles 31 de diciembre de 2008 Política Propone el PRI en la Cámara demandar a Calderón congelar precios de básicos

■ En dictamen prevé que el Congreso plantee la desaparición de la comisión de salarios mínimos

Propone el PRI en la Cámara demandar a Calderón congelar precios de básicos

■ Las medidas presidenciales anteriores sólo fueron mediáticas, expresan los diputados del tricolor

■ El poder adquisitivo de los trabajadores ha caído a 25.76% durante el actual sexenio, señalan

Enrique Méndez

A propuesta del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), la Comisión del Trabajo de la Cámara de Diputados aprobó un dictamen con punto de acuerdo para exigir al gobierno de Felipe Calderón adoptar una política “para definir los precios a los productos de la canasta básica, en tanto no existan condiciones de una verdadera y sana competencia entre productores y comercializadores”.

La comisión lamentó que sólo en los primeros dos años del actual sexenio el poder adquisitivo de los trabajadores haya caído a 25.76 por ciento del que tenía en 1976, “es decir que los ingresos de los asalariados no les permiten cubrir ni la cuarta parte del costo de los insumos básicos para tener una vida digna”, por lo que también se solicitó al Ejecutivo reconsiderar un aumento a los salarios por encima de la inflación esperada que definió el Banco de México (BdeM) en su más reciente informe.

En su solicitud, los legisladores priístas expresaron que “una de las perspectivas más escalofriantes es que los altos precios de los alimentos persistirán al menos durante todo el próximo año” y, por tanto, el documento plantea citar a comparecer al titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano Alarcón, ante comisiones “a fin de que exponga la estrategia anticrisis” del gobierno panista.

También se pretende que el funcionario federal “informe los esfuerzos y acciones que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) implanta para sancionar administrativamente a los vendedores o proveedores que especulen con la venta de productos que integran la canasta básica”.

El dictamen considera que las dos cámaras del Congreso se expresen públicamente en favor de realizar las modificaciones necesarias “que permitan la desaparición de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, ya que en los últimos años las acciones de ésta han sido avaladas únicamente por la representación del sector empresarial, y porque insiste en violar el artículo 123 constitucional al fijar salarios mínimos insuficientes, alejados de toda realidad y racionalidad económica, en perjuicio de los trabajadores mexicanos, con las consecuencias y responsabilidades que ello implica”.

Sólo 24 de 150 productos

La propuesta de los diputados priístas se hizo a partir de que, aseguraron, no se ha podido frenar el aumento de precios de artículos de consumo popular en el país, “a pesar de las medidas anunciadas por Calderón para enfrentar la crisis generalizada”, como el acuerdo del 18 de junio pasado con las grandes cadenas comerciales de congelar el precio de 150 productos, que se limitó en realidad a 24.

“Las disposiciones del gobierno federal de congelar precios en esos artículos, en los hechos, y ante los ojos de la población, pasó a ser meramente una acción mediática y no estructural, pues no se incluyeron la mayoría de los productos que integran la canasta básica, y en consecuencia no resolvió la problemática alimentaria y del consumo popular, ante el avance de una crisis mundial que (también) enfrenta el país. Por ello, la referida disposición no trajo mayores beneficios”, argumentaron.

En su iniciativa, resaltan que durante 2008 todos los granos alimenticios –maíz, trigo, arroz, frijol y oleaginosas– registraron aumentos, en algunos casos superiores a ciento por ciento. “En materia alimentaria, en los 12 meses recientes la inflación se ha tornado preocupante, no obstante las voces de las esferas oficiales, en sentido contrario. Y los análisis, estudios y proyecciones de diversos especialistas reportan que el alza de los alimentos, los productos y servicios de consumo popular no tendrán tregua debido a las presiones inflacionarias externas e internas, originadas por el aumento de otros precios. Baste señalar los 33 incrementos en el precio de las gasolinas y sus efectos en el resto de la economía”, indican.

En sus consideraciones, el tricolor resaltó que la canasta básica constituye una figura indispensable para entender y satisfacer las necesidades de los trabajadores, sus familias y de la sociedad y que, de acuerdo con diversos estudios de instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México, los productos que la integran registran un aumento sostenido, y el resultado es que “el nivel de vida de los más pobres en México continúa en descenso”.

Debido a que la Comisión de Trabajo y Previsión Social la preside el panista Tomás del Toro del Villar, en el dictamen se hace amplia referencia a los acuerdos entre Calderón, los industriales, distribuidores y las cadenas comerciales trasnacionales, con objeto de reducir los precios de los productos y, de manera especial, de los juguetes en la temporada de Navidad y Reyes.

La comisión refirió que el 18 de junio pasado Calderón “fue enfático al aseverar cero tolerancia contra especuladores y acaparadores e hizo un llamado a toda la sociedad, recalcando que son tiempos de unidad, solidaridad y patriotismo”.

No obstante, al revisar el índice nacional de precios al consumidor (INPC), esa instancia legislativa reconoció que ese indicador acumuló a octubre una variación de 5.76 por ciento, es decir, 3.60 puntos más que en el mismo periodo de 2007, que fue de 2.16 por ciento. También admitió que “en efecto, el poder adquisitivo del salario mínimo ha perdido una enorme capacidad de compra;el desplome de 1982 a 2000 alcanzó 25.76 por ciento, y a 2006, de 25.48 por ciento”.

 
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