Usted está aquí: lunes 15 de diciembre de 2008 Cultura La Capilla da voz a quienes no se dejan atrapar por el espíritu de la Nochebuena

■ Presenta Los antinavideños 08: perversiones en el pesebre, cuatro historias tragicómicas

La Capilla da voz a quienes no se dejan atrapar por el espíritu de la Nochebuena

Arturo García Hernández

¿Cómo es posible?: hay gente que no es feliz durante la temporada navideña; que no puede o no le gusta andar de compras en las tiendas atiborradas de semejantes; que no se deja poseer por el espíritu navideño ni siente en estos días especial amor hacia la humanidad y ni siquiera hacia su propia familia; gente que odia al tío que se emborracha en Nochebuena y que está hasta la madre de romeritos en la cena de Navidad; gente que en estos días experimenta soledad y tristeza que no se mitigan con un arbolote lleno de luces. En pocas palabras: gente que “se siente de la chingada”. ¿Cómo es posible?

Para dar voz a esta especie de cofradía de antinavideños anónimos, en el teatro La Capilla se presenta por estos días el espectáculo Los antinavideños 08: perversiones en el pesebre, integrado por cuatro textos de dramaturgos mexicanos, alusivos a esa manera de ver y vivir la temporada navideña.

Hace 15 años, el dramaturgo canadiense Yvan Bieneveneue fundó un irreverente concepto teatral en Montreal, cuya finalidad era cuestionar la superficialidad, el falso afecto y el consumismo que envuelven la temporada navideña.

Convocó a jóvenes dramaturgos quebecquenses para que escribieran obras que tuvieran que ver directa o indirectamente con la Navidad. En 2003, Boris Schoemann, director artístico de La Capilla, tuvo la idea de emular la experiencia en México. Ese año montó Ángeles exterminadores, de Bieneveneue.

Al año siguiente, en colaboración con la Compañía Los Endebles, convocó a dramaturgos mexicanos para tratar de generar una cultura del cuento antinavideño en México. La respuesta fue inesperada: “Nos dimos cuenta de que había más antinavideños de los que imaginábamos, gente que realmente se siente de la chingada en estas fechas.”

Con este concepto se produjeron los espectáculos Antinavideños anónimos (2004), Cuentos antinavideños (2005) y Cuentos antinavideños no aptos para menores (2007). Este año se presenta Los antinavideños 08: perversiones en el pesebre, conformado por cuatro historias: Gato negro, de Verónica Bujeiro, dirigida por Angélica Rogel e interpretado por Carmen Ramos; El síndrome de Riedel, de Angélica Rogel, dirigido por Ginés Cruz y actuado por Dobrina Cirsteva; La más feliz, de Maru Sánchez de Lara, dirigido por Richard Viqueira y actuado por Patricia Madrid, y Acotaciones, de Hiram Molina, en la que actúa Luis Mario Moncada y dirige Alejandra Chacón.

La novedad este año es que la selección de los textos se hizo mediante convocatoria abierta, lanzada por La Capilla.

Todas las historias tienen en común –era parte de los requisitos– que, por fuertes que sean los temas abordados, reciben un tratamiento tragicómico en el que prevalece el “humor negro”.

La temporada será del 18 al 23 y del 26 al 30 de diciembre, todos los días, a las 20 horas, en el teatro La Capilla (Madrid 13. Del Carmen, Coyoacán).

 
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